Urmeneta no podrá dibujar toros azules

El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Iruñea condena a Katuki Saguyaki a cesar en «la transformación de cualquier forma de los Dibujos del Universo Kukuxumusu». Tras abandonar la empresa que fundó, Mikel Urmeneta se queda ahora sin poder seguir dando vida a sus personajes, aunque adelanta que la batalla judicial acaba de empezar.

Como le pasó a Fausto con Mefistófeles, resulta que Mikel Urmenta perdió parte de su alma cuando se firmó el acuerdo por el que Ricardo Bermejo se quedó con dos tercios de Kukuxumusu. Así lo ha entendido la juez que ha señalado que los personajes ya no le pertenecen y, por tanto, ya no podrá dibujarlos. Urmeneta ha anunciado que recurrirá.

En realidad, lo que ocurrió es que, en 2014, Bermejo compró las acciones de los dos socios de Urmeneta (Txomin Domínguez y Koldo Aiestaran). Tras el acuerdo, Bermejo pasó a controlar las dos terceras partes de la empresa –que acumulaba enormes deudas y en la que hoy trabajan 28 personas– y Urmeneta se quedó como director creativo. El contrato incluía cláusulas en las que se estipulaba que la empresa era propietaria de los derechos de 15.000 dibujos y lo que se denominaba como «Universo Kukuxumusu». Y también se estipulaba que la empresa tenía el derecho a «transformar» todas estas imágenes.

Mientras Urmeneta siguió en la empresa, la letra del contrato no supuso mayor problema. Pero las personalidades del dibujante y el publicista chocaron frontalmente. Todo acabó a finales de 2015 con un encontronazo en el que el ordenador Apple de Bermejo acabó en el suelo. El dueño de la empresa llevó a Urmeneta a los tribunales y pedía para él ocho años de cárcel por coacciones y amenazas. La semana pasada fue sancionado con 1.800 euros.

El exdirectivo, que sigue manteniendo su tercio de la empresa, fundó una compañía nueva llamada Katuki Saguyaki y planteó una batalla frontal por los derechos. En Katuki Saguyaki tomaron parte otros dibujantes que crearon el estilo de la marca de camisetas y su primera colección compartía el trazo, la temática, los colores y todos los elementos que se asocian ala marca Kukuxumusu. Eran prácticamente indistinguibles, pero a su vez creaciones nuevas. Entre ellas, aparecía el icono de la marca: el toro azul.

La colección fue automáticamente denunciada por Bermejo, que dejó en manos de los tribunales la decisión sobre hasta dónde llega ese «Universo Kukuxumusu». La tesis de Urmeneta es que únicamente a los 15.000 dibujos registrados, no a obras de nuevo cuño. Pero la juez entiende que no, precisamente porque el contrato incluía también los derechos de transformación. «La sentencia les condena a cesar y abstenerse de transformar en cualquier forma los dibujos del Universo Kukuxumusu mediante su adaptación o recreación en cualquier nueva escena, situación o peripecia en la que pudieran ser colocados», aclaraba ayer Kukuxumusu a través de una nota.

Un pollo que dibuja un toro

De golpe y porrazo, Urmeneta ya no puede seguir dibujando a sus personajes. La respuesta del dibujante fue un vídeo en el que pinta un graffiti de su característico toro (Mr. Testis) oculto tras una máscara de pollo.

«Si tan claro que Testis es suyo, ¿por qué ese dibujo está registrado más de 500 veces?», denunciaba Urmeneta a GARA. «Me condenan a ser otro. Uno no puede dibujar si le cortan las manos, pero esto va más allá. Reprimen tu creatividad, tu subconsciente y tu imaginación, que es lo más íntimo que uno tiene», señaló. En Kukuxumusu, responden que no se le está cercenando nada, que simplemente tiene que dibujar cosas distintas a las que vendió.

Por su parte, el creativo tiene intención de denunciar a Kukuxumusu por plagio y llevar el caso hasta el Supremo para acabar generando jurisprudencia sobre los límites de los derechos de autor. Urmeneta se apoya en que, entre los 15.000 dibujos, hay personajes creados por otros autores como su hermano Asisko o Álvarez Rabo, que después los han seguido usando. Le respaldan las principales asociaciones de dibujantes del Estado.

Declaraciones

«Recurriremos la sentencia y denunciaremos por plagio a Kukuxumusu, por utilizar nuestros personajes en nuevas escenas»

Mikel URMENETA

Katuki Saguyaki

«A Mikel Urmeneta nadie le impide ni le prohíbe seguir dibujando con su estilo. Lo que no puede es utilizar los dibujos cuyos derechos fueron previamente vendidos a Kukuxumusu»

KUKUXUMUSU

Comunicado oficial