La continuidad, la txapela deseada por Asier Agirre

El de Arrotxapea, que solo ha podido estar en activo tres meses seguidos, regresa hoy a las canchas.

El Labrit volverá a llenarse esta tarde con un partido vital para la supervivencia en el Parejas de Olaizola II-Untoria y Elezkano II-Zabaleta. El que pierda estará virtualmente fuera del campeonato y el vencedor tendrá la opción de jugarse el pase a la final en la última jornada. Antes de ese partido, en el telonero, otro pelotari, Asier Agirre, comienza otro reto importante, el de conseguir, de una vez, esa continuidad en el juego de la que no ha podido disfrutar desde que debutara en junio de 2015.

Las lesiones han sido el quebradero de cabeza del delantero de Arrotxapea, cuyo periodo en activo más largo ha sido de unos tres meses. El primer percance le sucedió nada más debutar, en plena feria de San Fermín, cuando una luxación en el cuarto dedo de su mano derecha le hacía pasar por el quirófano, con lo que todo su primer verano como profesional lo tuvo que pasar de baja.

Reapareció para el Cuatro y Medio de Promoción, su primer campeonato en la nueva categoría, y tampoco le fueron mucho mejor las cosas. Reapareció con victoria, pero en el segundo partido de la liguilla, otra vez en el Labrit, chocó contra el muro de las gradas de la Bombonera, llevándose un fuerte golpe en la muñeca. Terminó el partido, pero las pruebas posteriores le diagnosticaron una fisura en su escafoides, por lo que se quedó sin opciones de poder disputarle a Jaka, finalmente campeón de la distancia, su pase a la final.

Con algo de retraso, entró en la cuarta jornada, se recuperó para el Parejas de Promoción, competición en la que, acompañado por Mikel Larunbe, hoy candidato a la final de Primera, llegó hasta la de Segunda, donde cayeron ante Gorka y Tolosa.

Otra lesión, esta vez en la mano izquierda, le privó de participar en el Manomanista de Promoción del año pasado, otorgando directamente el pase a semifinales a Aitor Mendizabal, que terminaría calándose la txapela ante Gorka.

Estaba previsto que jugara, pero tampoco pudo reaparecer en el Promoción de este año, lo que precipitó el debut de Joanes Bakaikoa, que entró directamente en competición, junto a Ladis Galarza.

Rotura de un tendón

El último contratiempo importante del delantero navarro ha sido la rotura de un tendón en el músculo dorsal de su brazo derecha. Esta lesión se produjo en agosto, en plena Aste Nagusia, y el proceso de recuperación se ha alargado mucho más de lo previsto. Después de tres meses de baja, Agirre regresó a las canchas, pero al poco tiempo, el 10 de diciembre, volvió a recaer, otra vez con el Labrit como escenario de sus desgracias.

Desde entonces no ha vuelto a vestirse de blanco un pelotari que ya lleva tres semanas entrenando a tope pero que no termina de quitarse el miedo de encima. Sus sensaciones en estas tres semanas han sido estupendas, ha conseguido ejercitarse sin ningún tipo de molestias, pero también lo había hecho de la misma manera hace cuatro meses, cuando tomaron la decisión de retomar la actividad.

En principio, su reaparición no estaba prevista para este fin de semana, era Iker Arretxe el que aparecía en los carteles para hoy en el Labrit, pero problemas del de Luzaide le han abierto las puertas a reaparecer al calor de los suyos en Iruñea.

Y no en un día cualquiera, porque por la mañana tiene otra cita importante en Logroño, donde debe examinarse de una asignatura de Magisterio, carrera que estudia a distancia. Por edad, 21 años, su trayectoria pelotazale puede alargarse, pero quiere que su rendimiento y, no las lesiones, determinen cuánto.

Cuando perder no es una opción

Perder no es una opción para Olaizola II-Untoria y Elezkano II-Zabaleta esta tarde en el Labrit, si quieren seguir manteniendo opciones de entrar en la final del Parejas. Las dos duplas que cayeron en la primera jornada se enfrentan con la presión de no tener colchón alguno, algo que, en principio, beneficia a los de Asegarce, con Aimar Olaizola mucho más ducho en este tipo de partidos sin red, en los que habitualmente siempre da lo mejor de su repertorio.

Es por eso que el de Goizueta y el de Nájera parten como favoritos para la cátedra, aunque casi todos los expertos coinciden en que la clave del partido puede estar atrás, concretamente en el nivel que José Javier Zabaleta pueda dar. El de Etxarren se está mostrando muy irregular en este Parejas, pero sus derechazos, en un Larbit que normalmente se le suele dar bastante bien, son capaces de cambiar el signo de cualquier partido. J.O: