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EIBAR

Las urnas eligen hoy al presidente azulgrana

El Eibar celebra elecciones al Consejo de Administración por primera vez en su historia. El Astelena acoge lavotación, que decidirá si es Amaia Gorostiza o Germán Albistegi quien se sienta en el sillón presidencial.


«Por primera vez» es una expresión que se utiliza a menudo desde que el Eibar llegó a Primera. Hoy toca en el plano institucional porque, efectivamente, por primera vez en su historia, tanto como Club deportivo como convertida ya, desde 1992, en Sociedad anónima deportiva, la entidad armera celebra elecciones. Al Consejo de Administración y, por extensión, a la presidencia. Porque esta misma noche, el nuevo Consejo que salga de las urnas, celebrará su primera reunión y elegirá a su presidente para el próximo lustro.

Hay 11.136 accionistas, que se reparten las 46.200 acciones de la sociedad, convocados. Deberán elegir 13 consejeros entre los 27 candidatos. 26 se han agrupado en dos candidaturas, una encabezada por la actual presidenta Amaia Gorostiza y la otra por su compañero en el Consejo Germán Albistegi. En solitario concurre el estadounidense John Sager, presidente de la Peña Eibar USA, que se vio en un principio como la nota exótica de esta historia y se ha acabado convirtiendo en un dolor de cabeza para la plancha de Gorostiza y el propio club.

No ha sido el único. La campaña electoral se ha desarrollado con mucho ruido, algo previsible, teniendo en cuenta la tensión que ha rodeado al Eibar desde la marcha de Álex Aranzabal, hace ahora un año. Los proyectos de Gorostiza y Albistegi son muy parecidos en la letra pequeña y con un claro sentido continuista. Así que las diferencias entre planchas se han acabado reduciendo a un plano más personal, hasta el punto de que parece un duelo entre caracteres, más que entre propuestas. La Ciudad deportiva, la función social de la entidad, la continuidad de la política deportiva... son los puntos fuertes de ambos proyectos. Sager, que aspira a convertirse en el representante del accionariado internacional –1.210 personas se reparten un 5% de la masa accionarial fuera del Estado español–, se ha centrado en aspectos más vinculados a esa aspiración, aunque ha basado la mayor parte de su campaña en las críticas, más que en las propuestas.

Buena parte de sus dardos se ha dirigido al club por la propia organización de las elecciones. Complicada, porque la regulación en los estatutos de la entidad era prácticamente inexistente y porque la cita en sí lo es. Su mensaje ha calado en un pequeño sector del entorno armero, pero lo cierto es que, amparado por la Ley de sociedades de capital, el proceso electoral no presenta dudas. Con el «pero» de que no se admite la votación por correo –todos los candidatos coinciden en la necesidad de reformar los estatutos para hacerlo posible en el futuro–, los accionistas tienen derecho a votar, de forma presencial o delegada. Sí, no –o «positivo/negativo», según la jerga utilizada en esta ocasión–, en blanco o abstención para cada uno de los candidatos; es decir, tal y como se hace habitualmente en las Juntas Generales ordinarias con las cuentas y los presupuestos. Los trece más votados tras, lógicamente, deducir los votos negativos de los positivos, serán los integrantes del nuevo Consejo de Administración.

Un sistema en el que han trabajado los abogados de las dos candidaturas y del club. Y aún así, la rumorología apunta a una posible impugnación de los comicios. Una circunstancia que no inquieta en la entidad. Javier Romero, abogado del club, asegura que «no nos situamos en un escenario de impugnación. El proceso se ha llevado cumpliendo toda la normativa aplicable. Si a alguien se le pasa por la cabeza, tendría muy poco recorrido». Si aún así alguien decide dar el paso, «comenzaría un procedimiento y un juez decidiría. Podría declarar el acuerdo válido o inválido y en ese caso se repetirían las elecciones. Pero es un escenario que no nos planteamos», insistió.

Las puertas del Astelena se abrirán a las 15.00

«Paciencia», piden desde el Eibar ante una jornada que se prevé maratoniana. Es probable que el resultado no se conozca hasta la madrugada pero el proceso comenzará mucho antes.

Con la intención de agilizarlo, las puertas del Astelena se abrirán a las 15.00. A partir de ese momento, los accionistas y quienes acudan con voto delegado podrán comenzar a acreditarse. Después comenzará la Junta, nunca antes de las 19.00, hora establecida en la convocatoria. Quienes acudan a primera hora deberán tener en cuenta que si abandonan el Astelena antes de votar, no podrán entrar de nuevo para depositar su voto.

La notaria supervisará la votación. Y, teniendo en cuenta la polémica suscitada por tratarse de papeletas nominales, las personas que colaboren en el proceso han firmado un acuerdo de confidencialidad.A.U.L.

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