GARA Euskal Herriko egunkaria
JO PUNTUA

La justicia española, cuestión de genitalidades


La Audiencia provincial de Sevilla inicia un juicio contra tres mujeres por la «procesión del coño insumiso» convocada por la CGT para denunciar la explotación que representa la precariedad laboral sobre todo en las mujeres. Dice el auto de la juez que las acusadas portaban en andas «la imagen de lo que parece un órgano genital femenino, a modo de Imagen Sagrada», lo que «constituye un escarnio al dogma de la santidad y virginidad de la Virgen María». El Espíritu Santo inspiró a los padres del Concilio de Letrán (allá por el 649) quienes efectuaron la solemne definición dogmática de la Virginidad Perpetua de la Madre de Dios, «antes, durante y después del parto» y aquel que dudare «sea anatema». Y es que el himen mariano, es mucho himen, al igual que los ovarios de la señora juez. Se ve que la imagen del coño insumiso de las compañeras anarquistas no estaba lo suficientemente tabicado. Sean pues condenadas.

Presumiblemente enorme, también, la bolsa escrotal receptora de los testículos del imaginativo fiscal del caso Altsasu: 375 años de cárcel por lesiones (eso sí, lesiones terroristas de las que dan miedo). Por qué no algo tan español como el garrote vil o la hoguera que tiene ese qué se yo, –al decir de Krahe–, que solo tiene la hoguera. No faltará la madera: la de tertulianos y periodistas en pos de la verdad. Y es que con el desafecto todo vale. Por eso, los palanganeros del régimen, a los prejuicios los llaman juicios y relatos a las posverdades. Así que el día 14 a las 17:30 en la Plaza del Castillo junto al farol colorao con los diez de Altsasu y sus familias. Jaia eta borroka, no queda otra.

Jueces y fiscales, ciegos ante el flagrante latrocinio de los amos y sus políticos; en permanente vigilancia de escarnios y enaltecimientos. Por no poder no podemos ni aborrecer a los de sotana ni a los del gorro atravesao. Ahora es delito. De odio. Échale ostias.