Detienen a Iñigo Gulina y Mikel Barrios por presunta vinculación a ETA en Berlín

La Guardia Civil y agentes de la policía alemana detuvieron ayer a Iñigo Gulina y Mikel Barrios en el marco de una operación contra las «estructuras clandestinas» de ETA en Alemania. Sortu criticó los arrestos.

La Guardia Civil, en colaboración con la policía alemana, detuvo ayer en Berlín a Iñigo Gulina y Mikel Barrios por presunta vinculación a ETA. Según informó la agencia Efe citando fuentes del Ministerio del Interior y de la Fiscalía de Berlín, los arrestos se produjeron en el marco de una operación dirigida contra las «estructuras clandestinas» de ETA en Alemania.

A Gulina, de 37 años y natural de Burlata, le relacionan con ataques a entidades bancarias y sabotajes a vías de tren ocurridos hace una década; mientras que Barrios, iruindarra de 29 años, está acusado de «pertenencia a organización criminal». Madrid y París habían emitido ordenes de detención contra los dos ciudadanos vascos, que permanecerán en prisión hasta que un juez dictamine su entrega a los estados español y francés.

Los arrestos se produjeron en el marco de la “Operación Exodus”, impulsada por la Guardia Civil en colaboración con cuerpos policiales de diferentes estados europeos. Así, las detenciones de Berlín se realizaron con la ayuda de las Oficina Federal de Investigación Criminal (BKA) y agentes de la policía del Estado federado de Berlín. Madrid advirtió ayer de que la operación continúa abierta.

Respuesta de Sortu

Sortu alertó de que las detenciones llegan «justo en el momento en el que ETA reflexiona en torno a su desmovilización». «Sortu cree que el Reino de España está haciendo todo lo posible para obstaculizar cualquier avance que nos lleve hacia la paz. Estamos convencidos de que quiere impedir cualquier proceso de desmovilización, tal como hizo con el desarme», señaló la formación abertzale.

Asimismo, censuró que el Estado español «no quiere pasar de pantalla, pese a que el Ministerio de Justicia francés y los Artesanos de la Paz han demostrado que es posible llegar a acuerdos». En este sentido, destacó que «el trabajo realizado entre ciudadanía, agentes e instituciones nos llevan hacia un nuevo escenario de paz y convivencia. Sin embargo, ahora que toca vaciar las cárceles, Madrid sigue atascado en una lógica de guerra, empeñado en llenarlas».

«En vez de tener las cárceles llenas de presos y presas, Euskal Herria necesita avanzar hacia la paz y la convivencia», añadió.