Hace 75 años que la Escuela Politécnica inició su senda

Cada año, la Escuela Superior Politécnica de Mondragon Unibertsitatea forma a 2.000 alumnos y alumnas, y a otros 3.000 profesionales que acuden a formarse más específicamente. En total, desde 1943, año de la fundación de la primera Escuela Profesional, han salido 36.000 titulados de sus aulas. En este 75º aniversario, subrayan que la facultad apuesta por la formación dual desde 1966 y que apoya la transferencia de conocimientos a las empresas.

Mondragon Goi Eskola Politeknikoa (MGEP) cumple su 75 aniversario y para celebrarlo realizarán varios actos a lo largo del año. El próximo 18 de mayo, aprovechando la entrega de diplomas a los nuevos egresados en el Kursaal donostiarra, realizarán un acto institucional para agradecer el apoyo recibido durante estos años al Gobierno de Lakua, la Diputación de Gipuzkoa, los ayuntamientos, las empresas, los trabajadores y los propios alumnos y alumnas.

En octubre, mes en el que se puso en marcha la escuela en 1943, realizarán otros actos a nivel local para destacar el lugar que ocupa Arrasate en el mapa como cuna donde surgió el movimiento cooperativo. Así, habrá un concierto que mezclará música y danza, y no dejarán pasar la oportunidad de acercar la tecnología a la sociedad, en este caso tratando temas como la Inteligencia Artificial o la robótica.

La Politécnica surgió como Escuela Profesional y posteriormente se convirtió en la Universidad de Ingeniería, una de las tres patas de Mondragon Unibertsitatea. Su actual director, Carlos García, fue el encargado de explicar ayer en qué momento se encuentra el centro y cuáles son los retos para el futuro.

Desde 1943, MGEP ha formado a más de 36.000 alumnas y alumnos, de los cuales 10.700 son egresados en estudios universitarios oficiales; 191, doctores; 23.560, en formación profesional; y 1.800, profesionales formados en títulos propios.

Actualmente, cuentan con 2.000 alumnos y forman anualmente a otras 3.000 personas que ya ejercen una profesión, «en cursos cuya duración varía de medio día a un año y medio», comentó. Uno de los grandes éxitos del que se congratulan en MU es la alta inserción laboral: «la tasa de paro de egresados es inferior al 5% y el empleo encajado es superior al 97%». Según el director, eso es gracias a que la Universidad responde a la demanda de las empresas.

Además, García recordó que la Politécnica realiza actividades de transferencia de conocimiento a la empresa. «Es la primera en el Estado. El 55% de esta transferencia está financiada por las empresas», manifestó.

Otro de los logros de MGEP es que ya en 1966 pusieron en marcha una empresa para hacer posible la formación dual, la cual mantiene su actividad a día de hoy. «Los alumnos van a clase por la mañana, y por la tarde a la empresa. En las 20 horas semanales que pasan en la empresa también se están formando. Las empresas entienden que este ejercicio de siembra les dará fruto dentro de unos años», expresó García.

Retos del futuro

La escuela responde a un «compromiso con la sociedad», el cual quieren renovar con motivo de este aniversario. «Nuestro trabajo es un medio para conseguir una sociedad mejor, más justa y equilibrada», subrayó el director. Por ello, quiso reconocer «a los trabajadores que han pasado por la escuela antes que nosotros y también a quienes nos han arropado en este viaje».

Relacionado con ese compromiso, recordó que hace quince años MU puso en marcha varias sedes en Goierri, con la intención de impulsar las empresas del territorio. Hace seis años también se inauguró Orona Ideo en Hernani, con la intención de extender su forma de trabajar a Donostialdea.

Cara al futuro, y dado que se encuentran en mitad del periodo estratégico 2016-2020, se centran en cómo ofrecer un mejor servicio teniendo en cuenta sus capacidades tecnológicas. «Buscamos modelos educativos aún más activos en los que se implique al alumno. El conocimiento no es tan importante, porque está al alcance de todos, pero nosotros les formamos en hábitos y técnicas para seguir formándose continuamente, porque a lo largo de nuestra vida vamos a tener que formarnos varias veces», comentó García. Añadió que uno de los retos a los que se enfrenta la Facultad de Ingeniería es atraer a más mujeres, puesto que el 30% que representan ahora no es suficiente, a pesar de que esta media esté muy por encima de países como Japón (4%).

En cuanto a las novedades, aseguró que «Internet nos ha cambiado la vida, pero en el entorno fabril todavía tiene mucho recorrido», por lo que vaticina avances tecnológicos relacionados con él.