Mariezkurrena ganó su batalla pero Aimar la guerra

Dos ganchos del de Goizueta decidieron un partido fajado en los cuadros largos en el que brilló el joven.

OLAIZOLA-ALBISU 22

ARTOLA-MARIEZKU. 20

Es posible que Aimar Olaizola ya no esté para romper él solo partidos de este calibre, con el de Goizueta cualquier afirmación de este tipo se antoja demasiado osada, pero, con un poco de ayuda, sigue manteniendo ese instinto y ese oficio que lo convierten en extremadamente peligroso. En un partido labrado básicamente en los cuadros largos, el veterano supo agazaparse ayer en Eibar –pegó 60 pelotazos menos que su compañero Albisu y 30 menos que Artola– para estar fresco en los momentos más calientes y decidir con dos ganchos, los dos mejores de todo el partido, un trabajado punto que les dio el liderato del Parejas en solitario.

En su estreno en la Catedral, ni siquiera la apuesta más fuerte de su empresa fue capaz de encontrarle el punto débil de un Jon Mariezkurrena que no solo no se arrugó ante la referencia en la zaga de su promotora, sino que se permitió el lujo de mostrarle la espalda durante la mayor parte del partido.

En ese sentido, se puede decir que el zaguero de Berriozar, que sigue sin mostrar mucha confianza de zurda pero que maravilló con su derecha, ganó la batalla particular de los cuadros largos, pero incluso con 11 pelotas perdidas, 9 en juego más otros dos saques completamente restables, Jon Ander Albisu hizo un trabajo de contención muy meritorio para que su delantero les diera el triunfo en la guerra por el liderato.

Dos contra uno

Y es que la pelea por los cuadro largos, en la que se disputó la mayor parte del partido, fue una lucha desigual en número, pues Albisu no solo tuvo que aguantar a Mariezkurrena, también tuvo que hacer frente a un Iñaki Artola mucho más colaborativo con su zaguero en el desgaste de su rival que Olaizola.

En los dos partidos previos, el de Alegia había escogido muy bien los momentos de pasar al ataque, pero ayer el zaguero rival no terminó de descoserse y su aportación ofensiva se antojó algo escasa ante el acierto, sobre todo en la parte final del choque, de Aimar Olaizola.

Porque durante gran parte del partido, en esa fase de desgaste en la que el resto se fogueó, tampoco estuvo especialmente resolutivo el veterano puntillero, que parecía estar reservándose para cuando las fuerzas de los demás se fueran gastando.

A pesar de que, en un arranque espumoso, los jóvenes se adelantaron 1-6, rápidamente neutralizado por Aimar y Albisu, ninguna de las dos parejas manejó rentas cómodas y el partido fue ganando en emoción a medida que se acercaba el momento de la verdad. Ahí, con 19-20 a favor, Mariezkurrena falló de zurda, por primera vez en todo el partido no consiguió quitar el remate a Aimar y, con dos ganchos, el primero del tres y medio, decidió el de Goizueta.