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EDITORIALA

Retirada de Siria, ola de dimisiones y desconcierto


Si existe alguna verdad de perogrullo en Oriente Medio, es que las guerras de EEUU siempre hacen que las cosas empeoren. Sin ir más lejos, el auge del ISIS, en Siria y en el resto del mundo, hunde sus raíces en la brutal invasión de Irak. Los constantes bombardeos no han hecho sino prolongar las guerras, más o menos secretas, desde Somalia hasta Afganistán, pasando por Yemen, Irak y Siria. Y es que la presencia de la maquinaría bélica estadounidense alimenta el resentimiento y no aporta nada tangible para que terminen de una vez y para siempre la destrucción y el baño de sangre.

Aunque solo sea por todo eso, el sorpresivo anuncio de Trump de una «próxima y total» retirada de los 2.000 soldados de EEUU de Siria, que participan en una misión que el Congreso nunca apoyó y la sociedad estadounidense desconoce casi por completo –y quizá también del grueso de sus tropas en Afganistán–, debe ser bienvenida. En apariencia, parece que Trump ha actuado solo, sin el apoyo de su Administración ni de sus aliados, que se han mostrado escandalizados. Las dimisiones exprés del Secretario de Defensa, Jim Mattis, y del enviado especial de EEUU para la coalición contra el ISIS, Brett McGurk, son una buena prueba de ello. Los «expertos» opinan que esas no son formas, que es un decisión tomada por un inestable, por un inconsciente, y que, en el fondo, supone una demostración de que Washington es un socio no fiable y peligroso, apuñalar por la espalda a los aliados, especialmente a los kurdos. Creen que el ISIS, aunque debilitado, no está derrotado; que ganan Rusia, Irán, Erdogan y Al Assad, y pierden Israel, los británicos y franceses y los estados del Golfo.

Trump no ha hecho nada diferente a lo que hizo su antecesor, Obama. Da cumplimiento a una promesa electoral muy bien vista por su base popular, que así mantiene políticamente y emocionalmente contenta. Y, de paso, le permite seguir creyendo que aún mantiene el control, aunque su Administración se hunda cada vez más en el pozo.