Título en juego en Australia

Muguruza busca hoy su tercer grande ante Sofia Kenin. Thiem y Djokovic jugarán mañana la final de chicos.

Esta mañana, a eso de las 9.30 hora de Euskal Herria, arranca la final femenina del Abierto de Australia, el primer Grand Slam de la temporada tenística. Garbiñe Muguruza y Sofia Kenin se verán las caras en la pista Rod Laver Arena de Melbourne.

Muguruza completó ayer una suave sesión de entrenamiento en pista cubierta que ni siquiera alcanzó la hora de duración con el propósito de seguir con las mismas sensaciones que le han servido para catapultar su nivel de nuevo y retomar las versiones de Wimbledon en 2017 y Roland Garros en 2016 cuando se proclamó campeona.

Garbiñe Muguruza solo se ha enfrentado una vez ante la que será su rival esta mañana en la gran final cuando cayó en la última edición del torneo de Pekín por 6-0, 2-6 y 6-2. «Es una jugadora que ha mejorado mucho. Es muy agresiva y la pelota le sale muy fácil de la raqueta. La clave para Garbiñe será ser paciente e intentar llevar la iniciativa aunque habrá momentos en los que no se podrá», advirtió ayer Conchita Martínez, entrenadora de Muguruza.

Precisamente la paciencia le ha servido de mucho, después de que el escenario en su debut ante la estadounidense Shelby Rogers, jugadora de la previa, fue el peor posible. La tenista de Caracas encajó un set sin realizar un juego como consecuencia de su impedimento físico, causado a su vez por un cuadro febril que arrastraba desde la semana anterior.

La vasco-venezolana explicó que a pesar de su malestar sentía que podía darle la vuelta al partido y a base de lucha y disciplina se apuntó los siguientes dos parciales por 6-1 y 6-0 para seguir viva en el cuadro.

Luego ganó a Ajla Tomljanovic, Elina Svitolina (5), Kiki Bertens (9) y Anastasia Pavlyuchenkova (30) y Simona Halep (4).

Thiem vs. Djokovic, la otra final

El austríaco Dominic Thiem no dudó ante el alemán Alexander Zverev y le superó por 3-6, 6-4, 7-6 (3) y 7-6 (4) tras tres horas y cuarenta minutos de partido, y se enfrentará en la final de mañana –9.30, hora de Euskal Herria– al serbio y vigente campeón Novak Djokovic.

El comienzo de Thiem fue titubeante tras conceder tres de sus primeros juegos al servicio y arrancar el partido con un desfavorable 3-6, pero después de reanudarse el partido tras interrumpirse por unos problemas técnicos relativos a la iluminación de la pista central, la reacción del austriaco fue instantánea en detrimento de Zverev.