Lula pide a los brasileños que no acaten las «decisiones imbéciles» de Bolsonaro

El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva pidió a los brasileños no acatar «ninguna decisión imbécil» del presidente, Jair Bolsonaro, sobre la pandemia, a la vez que hizo un fuerte alegato a favor de las vacunas contra el covid-19. Lula da Silva denunció, además, haber sido víctima de la mayor mentira judicial en 500 años.

Luiz Inácio Lula da Silva empleó su primera aparición pública tras la anulación de sus condenas para abordar la cuestión sanitaria, en un Brasil azotado por la pandemia, con más de 270.000 muertos y más de 11,1 millones de casos, y cuya gravedad niega su presidente ultraderechista. «Quiero hacer propaganda para que el pueblo brasileño no siga ninguna decisión imbécil del presidente de la República o del ministro de Salud (Eduardo Pazuello). ¡Tomen la vacuna!», exhortó el exmandatario brasileño.

La decisión del magistrado del Tribunal Supremo Edson Fachin permitió a Lula recuperar sus derechos políticos y eventualmente volver a ser candidato presidencial en 2022. Desde la sede del sindicato de los metalúrgicos de Sao Bernardo do Campo, en Sao Paulo, Lula da Silva cargó duramente contra el Ejecutivo de Jair Bolsonaro. «Este país esté totalmente desordenado, porque este país no tiene gobierno. No cuida de la economía, no cuida del empleo, de los salarios, de la salud, no cuida del medioambiente, de la educación, de los jóvenes, de la periferia... ¿De qué cuidan entonces?», cuestionó.

Afirmó que el covid-19 «está tomando cuenta de este país» y anunció que recibirá la vacuna contra el virus la semana que viene sin importarle de qué país llegue, en alusión a las críticas del mandatario ultraderechista contra algunas fórmulas y en especial las provenientes de China. «Muchas muertes podrían haber sido evitadas», añadió el líder de la izquierda brasileña.

Lula denunció que Bolsonaro, que critica el uso de la mascarilla y la imposición de medidas de distanciamiento para contener los contagios, está más preocupado por las armas. «Este pueblo no está precisando de armas, está precisando de empleo, de salario, de libros», apuntó.

Sobre su procesamiento, Lula da Silva afirmó que ha sido «víctima de la mayor mentira jurídica» en 500 años de historia de Brasil. «Estaba seguro de que la verdad vencería y ese día llegó», señaló el expresidente.

Fachin anuló el lunes todas las condenas contra Lula da Silva por supuesta corrupción en el ámbito de la operación Lava Jato. Aseguró no guardar rencores pese a tener razones para ello, «porque el sufrimiento por el que está pasando el pueblo brasileño, las personas pobres en este país, es infinitamente mayor que cualquier crimen que cometieron contra mí. No hay mayor dolor que levantarse cada mañana y no tener un café, un panecillo para el desayuno».