Keiko Fujimori recurre al fantasma del fraude

A medida que el candidato de la izquierda Pedro Castillo iba consolidando una ajustada victoria en las presidenciales de Perú, la derecha y su entorno económico y cultural empezaban a hacer públicos sus temores al vuelco político histórico en el país, comenzando por la candidata de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, quien denunció «fraude planificado y sistemático», y siguiendo por los grandes inversores de las empresas peruanas, sobre todo mineras.

Con el 97,9% escrutado, el candidato de Perú Libre, Pedro Castillo, mantenía ayer una ventaja de casi 80.000 votos sobre su rival, Keiko Fujimori, en las presidenciales. Pero el recuento de los votos del extranjero ralentizó desde el lunes el escrutinio y aún daba a Fujimori alguna esperanza. Aun así, no veía una victoria clara y denunció «indicios de fraude en la mesa».

La candidata se quejaba de que las impugnaciones de actas por parte de Perú Libre intentaban evitar que se contabilizaran las de mayor número de votos para la formación fujimorista.

«Esto es algo que es planificado y sistemático», aseguró su candidato a la Vicepresidencia, Luis Galarreta.

«Hay una clara intención de boicotear la voluntad popular», afirmó Fujimori, y pidió que las denuncias de otros casos similares sean compartidas en la redes bajo el lema #FraudeEnMesa.

La acusación tensó aún más el recuento de infarto y aireó el espectro de precedentes como el de Bolivia y el golpe que anuló la victoria de Evo Morales.

Perú Libre rechazó las acusaciones de fraude y aseguró que, por el contrario, la candidatura izquierdista «siempre fue víctima de este y, pese a todo, supimos enfrentar y vencer». Recordó que «fue el fujimorismo el que hizo el fraude en el 2000, dio un golpe de Estado que manejó el Poder Judicial y otras instituciones a su antojo y desestabilizó al Perú desde el Congreso», mientras Castillo pedía tranquilidad a sus seguidores.

También los grandes inversores y empresas mineras mostraron nerviosismo ante la posible victoria izquierdista.

La Bolsa de Valores de Lima cayó un 7,7% y el dólar subió un 2%, después de una jornada en la que la negociación en el mercado de valores tuvo que ser suspendida 20 minutos al caer por debajo del 7%, y luego reanudada sin lograr una recuperación. El BCR (Banco Central de Reserva) comenzó a vender dólares para evitar que la subida de la divisa fuera aún mayor.

Algunos de los valores más afectados fueron las acciones de las mineras Volcan, Cerro Verde y Nexsa que cayeron un 16%, 15% y 13%, respectivamente, así como la cementera Unacem y la proveedora de maquinarias Ferreycorp, con un descenso del 15% en ambos casos.

Castillo ha propuesto la nacionalización de sectores estratégicos y que las empresas mineras reinviertan parte de sus beneficios en las comunidades donde operan.

El miedo de la derecha peruana se ha reflejado también en el aviso del escritor Mario Vargas Llosa, excandidato contrario al fujimorismo y ahora su aliado, que auguraba recientemente un «golpe de Estado militar» en caso de victoria de Castillo.

La derecha esperaba un giro con el voto del exterior

Según los datos de la Oficina Nacional de Procesos Electorales al cierre de esta edición, el candidato del partido izquierdista Perú Libre, Pedro Castillo, contaba con el 50,23% de los votos válidos (8.631.775) frente al 49,77% (8.553.484) de la candidata del derechista Fuerza Popular, Keiko Fujimori, quien, sin embargo, se mostraba optimista ante la diferencia que esperaba remontar con el voto exterior.

Con casi 80.000 votos a favor de Castillo, aún faltaban por contabilizar una tercera parte de las actas en el extranjero, donde la candidata de derechas tiene más fuerza. La diferencia en este caso era de más de 60.000 votos, con lo que la proyección auguraba que se estrecharía, pero ya quedaba poco margen para el sorpasso y el candidato izquierdista estaba a un paso de la Presidencia.

Además también quedaban aún por contabilizar algunas actas del medio rural, donde Castillo ha arrasado, prolongando el tenso recuento.GARA