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Cuba autoriza la libre importación de alimentos y medicinas

El Gobierno de Cuba acordó autorizar, «excepcionalmente y con carácter temporal», la libre importación sin límites ni aranceles de alimentos y medicinas a quienes viajen a la isla como primera medida tras las protestas del domingo. Su presidente, Miguel Díaz-Canel, volvió a señalar a Estados Unidos como instigador de las mismas, pero también dijo que de la experiencia «tenemos que hacer un análisis crítico de nuestros problemas».


El Gobierno cubano anunció ayer la autorización de la importación «por la vía del pasajero» de alimentos, productos de aseo y medicamentos sin límites de valor y libre del pago de aranceles hasta el 31 de diciembre, cuando se realizará una valoración.

El primer ministro, Manuel Marrero, dio a conocer el primer paquete de medidas de calado social y económico para poner freno a las inéditas protestas del domingo y el lunes.

Facilitar la entrada de bienes de primera necesidad fue una de las demandas de quienes salieron a protestar en varias ciudades de la isla, que atraviesa una importante crisis. Las protestas dejaron un fallecido y más de un centenar de detenciones, aunque no hay cifra oficial.

Marrero subrayó que se quiere mostrar que «este Gobierno está vivo y está buscando soluciones al pueblo». Así, adelantó también la revisión de centrales eléctricas del país, con lo que se espera una «mejora de manera considerable en la capacidad de generación» y «lo que permitirá reducir las afectaciones». Y anunció una mejora en la producción nacional de medicamentos, deficitaria por la falta de materias primas debido al bloqueo impuesto por EEUU desde hace seis décadas.

Entre las medidas se incluye un programa provisional que garantizará a unas 300.000 personas que viven en lugares diferentes a donde están empadronados comprar la canasta básica subsidiada por el Estado.

Además, el ministro de Economía, Alejandro Gil, explicó que se van a «eliminar las obligaciones de usar la escala salarial en la empresa estatal», con lo que las compañías pueden «administrar su fondo de salario».

Aunque reiteró las acusaciones contra EEUU, al que señala como instigador de las manifestaciones, el presidente, Miguel Díaz-Canel, señaló que «de los disturbios también hay que sacar experiencia, también tenemos que hacer un análisis crítico de nuestros problemas».

No obstante, volvió a referirse al bloqueo por parte de EEUU que «atrasa y no permite avanzar a la velocidad que necesitamos» a Cuba, y reiteró que ese es el motivo fundamental de las «inconformidades» que se han reflejado en las protestas.

Aludió a los detenidos en las manifestaciones para indicar que «esas personas recibirán la aplicación de las leyes en su justa medida y sin abusos», y comentó que «habrá que pedir disculpas a quien, en medio de la confusión, fue maltratado injustamente».

Marrero informó, además, de que se acelerará el proceso de vacunación anticovid después de que el miércoles se registrasen 51 muertes a causa de la enfermedad, la cifra más alta desde el inicio de la pandemia.

«Revolución de colores»

Rusia se refirió ayer a lo sucedido en Cuba llamando a Estados Unidos a levantar el embargo. «Si en Washington realmente están preocupados por la situación humanitaria en Cuba y quieren ayudar a los cubanos, hay que comenzar (...) por derogar el bloqueo, rechazado desde el principio por toda la comunidad internacional», declaró en un comunicado la diplomacia rusa.

Le instó a «poner fin a la hipocresía y las políticas de doble fondo» y a no «inmiscuirse» en los asuntos internos de Cuba, al tiempo que advirtió de un intento de EEUU de iniciar una «revolución de colores» en el país.

Concentraciones por el fin del bloqueo en Euskal Herria

Bilbo, Iruñea, Donostia e Irun acogieron ayer sendas concentraciones de apoyo a Cuba «ante el enésimo ataque capitalista e imperialista», en las que cientos de personas exigieron el fin del bloqueo por parte de EEUU.

Denunciaron «otro intento imperialista de desestabilizar Cuba e intervenir en ella» e insistieron en que «el objetivo de esta estrategia de desestabilización es crear un escenario que justifique la posible intervención de EEUU y acabar así con la Revolución cubana». En esa estrategia se enmarca, dijeron, «la manipulación de redes sociales y medios» que «enaltecen algunos incidentes aislados, usan imágenes de otros países, mientras silencian movilizaciones espontáneas en defensa de la revolución», y «ocultan la represión en Chile o Colombia».

Recordaron que la ONU volvió a pedir en junio el fin del bloqueo que, en plena pandemia, «ha denegado a Cuba el derecho a disponer del equipamiento y material sanitario». «Cuba no necesita ayuda humanitaria –añadieron–. Practica una solidaridad que se basa en dar lo que tienes y no lo que te sobra. Cuba necesita acabar con el bloqueo económico y comercial vigente durante 60 años».GARA