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Sin apoyo para el presupuesto de Costa, Portugal se acerca al adelanto electoral


El Parlamento portugués comenzó ayer al debate de los presupuestos generales del próximo año, de cuya aprobación depende la supervivencia del Gobierno de Antonio Costa, que se enfrenta a un horizonte complicado tras el «no» anunciado por sus socios de izquierda, el Bloco de Esquerda y el Partido Comunista.

A falta de posibles cambios de última hora, los socialistas cuentan solo con 108 apoyos, insuficientes frente a los 117 votos en contra y las cinco abstenciones. «Mi deber es no dar la espalda en los momentos de dificultad y por eso no dimito», afirmó el primer ministro portugués, que abrió la puerta a explorar todas las vías de diálogo para evitar un adelanto electoral aunque, advirtió, «no a cualquier precio».

La líder del Bloco, Catarina Martins, acusó al Ejecutivo de no aceptar ninguna de sus propuestas y de no ofrecer ninguna solución de consenso para evitar una crisis política, en la medida en que el rechazo presupuestario derivaría en la convocatoria de elecciones anticipadas, probablemente en enero. El presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, ya adelantó que está listo para cualquier eventualidad, mientras Costa señalaba que «todavía hay carretera para andar y debemos continuar», en referencia a la experiencia de la geringonça, el pacto de legislatura de 2015. En 2019, sin embargo, el primer ministro descartó un acuerdo global de gobernabilidad y optó por negociaciones puntuales.