GARA Euskal Herriko egunkaria

Mélenchon sueña con dar la sorpresa y pasar a la segunda vuelta de las presidenciales

A 19 días de la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas, el candidato de la izquierda Jean-Luc Mélenchon asciende poco a poco en las encuestas, reviviendo la hipótesis de su presencia en la segunda vuelta frente al jefe de Estado saliente, Emmanuel Macron.


Impulsado por las encuestas, el dinámico candidato de la izquierdista La France Insoumise, Jean-Luc Mélenchon, sueña dar la sorpresa y pasar a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales sacudiendo el panorama vaticinado desde el comienzo que enfrentaría, como en 2017, al jefe de Estado saliente, Emmanuel Macron, con la candidata de extrema derecha Marine Le Pen.

Desde hace meses, el líder de los «insumisos» sube lentamente en las encuestas: entre el 13% y el 15% de los franceses votaría por él el 10 de abril, según las difundidas el lunes, por delante de la candidata de la derecha tradicional Valérie Pécresse (9,5%-10%) o del ultraderechista Eric Zemmour (11%-10%). Solo Macron, a quien los sondeos sitúan como ganador de la primera vuelta del 10 de abril con casi el 30% de los votos, y la líder de la extrema derecha Marine Le Pen, con el 20%, superan a Mélenchon.

Con la movilización de decenas de miles de personas el pasado domingo en su marcha por la Sexta República al grito de «Vamos a ganar» o «Mélenchon presidente», el candidato de La France Insoumise demostró que hay que tenerlo en cuenta al menos hasta el 10 de abril, o quizás más.

Mélenchon, formidable orador que terminó cuarto en las presidenciales de 2017 con el 19,58% de los votos, espera ganar cinco puntos en tres semanas para pasar a la segunda vuelta. Para ello, a pesar de su progresión deberá hacer frente al reto de convencer al electorado de la izquierda moderada y a los indecisos y abstencionistas, a cuya «responsabilidad moral» apeló el domingo.

Según expertos, los votantes de izquierda podrían ver como un «voto útil» a Mélenchon, ya que el resto de candidatos a la izquierda de Macron están muy rezagados: el ecologista Yannick Jadot tiene una intención de voto del 5%-6%; el comunista Fabien Roussel, un 4%-5%, y la socialista Anne Hidalgo no supera el 2%.

Pero para muchos votantes de la izquierda, el candidato «insumiso», que defiende medidas sociales contundentes como la jubilación a los 60 años, el control de los precios o el salario mínimo de 1.400 euros, despierta también rechazo por sus polémicas declaraciones pasadas.

Su hipotética presencia en la segunda vuelta haría «más interesante el debate, sin duda», remarca Philip Golub, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Americana de París, porque el tribuno Mélenchon podría «hacer pasar un mal rato a Macron», otro formidable orador.

Del éxito a la supervivencia: ascenso y caída del PS

Hace ocho años habría sido la imagen del éxito: la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y el entonces presidente, François Hollande, sobre el mismo escenario. Pero, hundidos en los sondeos, el PS se juega ahora su futuro en el Estado francés.

El público reunido una tarde de marzo en Limoges rompe en aplausos cuando la candidata del PS a la Presidencia hace acto de presencia. Podría ser un mitin al uso, pero en el ambiente planea el fantasma de la derrota el próximo 10 de abril. «¡Les llamo a la constancia y al valor! ¡Creamos en nosotros mismos!», pide Hidalgo.

Pero con un 2%-3% de intención de voto lograría el peor resultado de un partido histórico, que tuvo dos presidentes. Y si supera el 5%, en lugar de optar a los ocho millones de euros de indemnización como máximo, solo podría recuperar hasta 800.000 euros, un nuevo revés financiero.

Si a un mal resultado en la presidencial se le suma una debacle en las legislativas de junio, aparecerá la cuestión de la supervivencia del partido en su forma actual, aseguran los expertos.GARA