Cinco pasos en horizontal y vertical

El Eibar encara la recta final del curso liderando la clasificación. Sanse y Amorebieta llegan obligados a una complicada remontada.

En cinco semanas concluirá la temporada en Segunda. Una recta final que el Eibar encara al frente de la clasificación y con todo a favor para ascender. Sanse y Amorebieta, al contrario, están obligados a acelerar como no lo han hecho hasta ahora, con la salvación a siete puntos.

Los cinco pasos para el equipo azulgrana serán en terreno llano, que no sencillo. Ya lo está comprobando el Eibar en las últimas semanas, en las que la acumulación de esfuerzos, la tensión, las bajas y la necesidad de puntos de todos los equipos hacen que el tópico describa la realidad con absoluta nitidez: hay que hacer muchas cosas bien para ganar los partidos. Lo están cumpliendo los guipuzcoanos, inamovibles del liderato desde la 24ª jornada aunque tampoco ellos han podido alejar a sus, en principio, únicos rivales. El Almería está a un solo punto y el Valladolid, a dos.

No es la única ventaja del Eibar, que disputará tres de sus cinco partidos en Ipurua aunque dos de ellos le enfrentarán a Valladolid y Tenerife. La visita de los blanquivioletas conlleva una oportunidad y una obligación. Porque si el Eibar gana, el paso será poco menos que definitivo, pero si pierde puede quedar por detrás y con el golaverage en contra tras el 2-0 de Zorrilla en la primera vuelta. Los números sí sonríen respecto al Almería, con doble triunfo armero, y también un triple empate en cabeza aseguraría el ascenso al Eibar.

Si el equipo armero representa la regularidad –desde la 11ª jornada solo ha estado fuera de los dos primeros puestos en tres ocasiones– y la resiliencia, no hay más que ver cómo ha sumado bastantes de sus últimos puntos o que es el equipo que menos partidos ha perdido, el Valladolid tiene a su favor la inercia de la remontada que ha protagonizado tras un arranque de Liga más complicado aún que el de los azulgranas. Pero también le pesan las dudas del que todavía no ha sido capaz de dar el gran salto, con el tiempo corriendo en su contra: solo en cuatro jornadas ha ocupado plaza de ascenso directo. Y todavía tiene que enfrentarse a Eibar y una Ponferradina que pelea por el play-off.

El Almería afronta, en teoría, el calendario más asequible. Otra cosa es que lo solvente como quiere porque la marcha del equipo andaluz ya no es la que hizo creer que para Navidades era de Primera. Pero, como el Eibar, además de su mínima ventaja sobre el Valladolid, ha mostrado dos virtudes que le convierten en el gran candidato al ascenso junto a los armeros. La regularidad –solo ha estado por debajo del segundo puesto en cinco ocasiones– y la capacidad para sobreponerse a los malos momentos, tanto para solventar partidos concretos –el lunes se impuso al Sporting con un gol en el descuento de un flojísimo partido– como para voltear rachas delicadas como la que atravesó a principio de año, cuando sumó un punto en cinco partidos para encadenar después cuatro victorias.

Una pared

Lamentablemente, es en una pared de piedra donde deben dar sus cinco pasos Sanse y Amorebieta que, aunque las matemáticas impliquen hasta cuatro equipos más, ya solo pueden aspirar a salvarse a costa de Málaga y Sporting, ambos con siete puntos de ventaja sobre los dos equipos vascos y en plena caída en picado, sobre todo el conjunto asturiano.

Junto a la diferencia de puntos, tampoco ayuda la trayectoria que han dibujado hasta ahora donostiarras y zornotzarras, que no han sido capaces de firmar a lo largo de 37 jornadas la racha que necesitarían ahora para salvar la categoría. El Sanse es el que más se ha acercado, tras enlazar tres victorias y un empate hace un par de meses. El Amorebieta llegó a firmar una de siete partidos en los que solo encajó una derrota aunque tampoco pudo ganar más de uno.

El problema añadido para el equipo azul es que sale perdiendo en todos los posibles empates a puntos, individuales o múltiples, salvo con el Málaga, con el que tiene el golaverage particular empatado y el general ligeramente a su favor. El Sanse ha tenido ‘más ojo’ para elegir sus victorias –ha sumado casi la mitad de sus puntos ante sus tres rivales directos– y todos los empates le favorecen.

Otra cosa es que pueda llegar a utilizar esa baza para mantener la categoría en una recta final que le enfrentará a Valladolid, Fuenlabrada, Almería, Huesca y Zaragoza. El Amorebieta buscará la remontada ante Fuenlabrada, Almería, Huesca, Cartagena y Ponferradina.