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REAL

Un equipo acostumbrado a ganar

Los goles de Illarra y Zubeldia, dos de las seis novedades en el once, dieron la séptima victoria seguida a un equipo que se coloca tercero empatado con el Atlético. La rotura fibrilar de Aihen, única nota negativa de un partido en el que reapareció Barrenetxea.

Asier Illarramendi celebra su primer gol en cuatro años que abrió el marcador en Balaídos. (Agencia LOF)

La Real dio continuidad a su racha de victorias para establecer con siete la mejor desde que Imanol está en el banquillo en un partido igualado que se decidió en una jugada a balon parado en la que Zubeldia cabeceó sin oposición un saque de esquina lanzado por Brais Méndez, que dio otra asistencia en su vuelta a Vigo.

Imanol recordaba tras el partido que los detalles marcan la diferencia y ahí está la diferencia de nueve puntos entre los dos equipos en la clasificación, porque en el juego el Celta fue mejor que la Real en el primer tiempo, como superó al Real Madrid y al Barcelona en una mitad de tres partidos en los que ha perdido.

La Real, por contra, es un equipo que ha convertido la victoria en una costumbre y empieza a dar igual quiénes jueguen. Imanol ha planteado tres alineaciones muy diferentes en los últimos partidos ante Villarreal, Sheriff y Celta y con distintos planteamientos ha sido capaz de sumar los. nueve puntos para manternerse líder en la Europa League en solitario y colocarse tercero en la Liga empatado con el Atlético con 19 puntos, a solo tres del Barcelona, segundo.

LA ALEGRÍA POR ILLARRA

El partido, además de los tres puntos, tuvo como aspectos positivos lograrlos con seis cambios con respecto al jueves con la entrada de Gorosabel, Zubeldia, Aihen, Zubimendi, Kubo e Illarra, que en su primera titularidad en Liga fue capaz de reaccionar a un error que le costó la amarilla y el cambio en el descanso con su primer gol desde que el 24 de agosto de 2018 marcara en Leganés antes de iniciar su calvario.

El capitán blanquiazul adelantó a la Real de un gran zurdazo desde fuera del área en un accidentado primer tiempo en el que el Celta fue mejor al conseguir impedir que la Real tuviera la posesión del balón y el control del juego como acostumbra y se tuvo que dar por satisfecho de irse al descanso con empate tras aprovechar Iago Aspas un error de Zubimendi en un pase.

El Celta también comenzó mejor el segundo tiempo, con dos opciones de Gabri Veiga y Aspas, pero fue la Real la que acertó en un error de marcaje del equipo local que aprovechó Zubeldia para lograr su primer gol de la temporada en su vuelta al equipo tras superar su lesión muscular.

A partir de ahí la Real estuvo mejor y, a pesar de que Coudet sacó a todos los jugadores ofensivos que tenía en el banquillo, apenas sufrió para defender su ventaja en un lanzamiento de Carles Pérez que desbarató Remiro. La nota negativa del encuentro estuvo en la lesión de Aihen Muñoz, que después de querer seguir con una brecha en la cabeza tras un encontronazo en el primer minuto, tuvo que ser sustituido con una rotura fibrilar.

Imanol: «Me alegro mucho por Asier»

Imanol manifestó tras el encuentro que «me alegro de manera especial por Asier, porque llevaba mucho tiempo entrenándose muy bien y ha hecho un gran primer tiempo, además del gol. Una pena la tarjeta, que he tenido que sustituirlo al descanso. No solo es su alegría, también la mía, la de la afición y la del equipo porque ha sido ejemplar su comportamiento en el tiempo que lleva lesionado y tras recuperarse sin que le dé minutos. Me alegro mucho. He decidido apostar por él sabiendo que Mikel podía jugar de inicio».

Sí, confirmó que influyeron unas molestias que arrastra Merino, «pero tenía el ok del servicio médico y he apostado por él convencido y decidido. No quería arriesgar con Mikel, pero había hablado que si había que echar mano de él lo haría y lo he hecho. Me alegro por Asier y por el equipo porque, independientemente de quién juegue, compite y suma de tres en tres».

Eduardo Coudet, técnico local, coincidió con Imanol al reconocer que el partido se decidió en un detalle: «No me parece justo el resultado, pero hablar de justicia en el fútbol no existe. Nos hemos quedado con las manos vacías. Tenemos que ser más contundentes. El partido se decide en un detalle». J.I.