El gen competitivo blanquiazul resiste ante la calidad del Madrid

Con nueve bajas y la lesión de Aritz, que obligaron a Imanol a acabar el encuentro con un equipo de circunstancias, la Real fue capaz de mantener el empate y de crear oportunidades ante un rival crecido.

La Real consiguió resistir el acoso del Real Madrid y sumar un punto de gran valor en el Bernabeú por las nueve bajas con las que afrontó el partido, a las que se sumó la de Aritz para acabar con un equipo de circunstancias que consiguió contener a un conjunto plagado de futbolistas de calidad que están con gran confianza.

Imanol se decantó por Aihen en el lateral izquierdo, Illarra en el centro del campo con Zubimendi, Brais Méndez y Kubo en la media punta y Oyarzabal con Sorloth en la delantera y la Real comenzó muy bien el encuentro. Controló el juego y tuvo dos buenas ‘opciones de Sorloth e Illarra en el primer cuarto de hora tras subidas al ataque de Aihen, pero con el paso de los minutos el Real Madrid fue a más, acorraló a la Real y tuvo varias ocasiones para adelantarse antes del descanso.

CAMBIO DE SISTEMA

La tendencia del final del primer tiempo se agudizó en el inicio del segundo, con una Real impotente ante el vendaval blanco. Zubeldia estuvo providencial para evitar un gol de Rodrygo e Imanol decidió cambiar el sistema y aparcó el rombo y apostó por un 4-1-4-1 con Kubo y Robert Navarro en las dos bandas para ayudar a los laterales. Luego Aritz se lesionó e Imanol tuvo que colocar a Zubeldia en el lateral derecho, a Zubimendi de central y a Olasagasti de pivote

El Madrid siguió su acoso, pero este cambio cerró mejor el camino a la portería de Remiró, que sacó una gran mano ante un intento de vaselina de Vinicius. También Courtois evitó un gol de Kubo y la Real sufrió para acabar sin conceder más ocasiones y tuvo algunas para buscar el triunfo.