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Un manifestante quema un Corán en un acto autorizado por la Policía en Suecia


Un hombre quemó ayer un ejemplar del Corán junto a una mezquita en Estocolmo, en el primer acto de este tipo autorizado por la Policía sueca después de que los tribunales revocaran recientemente una prohibición anterior de las autoridades apelando a motivos de seguridad. Salwan Momika, de origen iraquí, aseguró que su intención era criticar al islam antes de poner tocino sobre el Corán y prenderle fuego en un acto al que acudieron unas 200 personas y que contó con fuerte presencia policial. La protesta se produjo en una jornada en la que musulmanes de todo el mundo celebran el Eid al-Adha o fiesta del sacrificio.

La quema de un ejemplar del Corán en enero delante de la Embajada turca a cargo de un ultraderechista provocó una ola de protestas en el exterior, incluida Turquía, que mantiene el bloqueo a la ratificación del ingreso de Suecia en la OTAN.

El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, calificó el acto de ayer de «provocación», y consideró que era «legal, pero no idóneo».

El Gobierno turco reaccionó calificando la acción de «escandalosa» y «despreciable». «Especialmente antes de la cumbre de la OTAN, las autoridades de Suecia, que quiere ser aliadas de Turquía, deberían poner fin a la ilegalidad y las provocaciones que se suceden en su país bajo la apariencia de libertad, y tomar las medidas necesarias», declaró el ministro de Justicia, Yilmaz Tunc.

La OTAN ha urgido a Turquía a levantar su veto al ingreso de Suecia antes de la cumbre del 11 y 12 de julio en Lituania, pero ayer el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, advirtió además de que sigue considerando «inaceptable» que activistas kurdos puedan manifestarse «libremente» en Suecia.