GARA Euskal Herriko egunkaria

París da luz verde a la delimitación de alquileres solicitada por Baiona

El proyecto para regular los precios de los alquileres en 24 localidades de la llamada zona tensionada planteado por la Mancomunidad Vasca en 2022 ha recibido finalmente la autorización de París, aunque los trámites para su puesta en marcha se dilatarán hasta 2024.

Promoción de viviendas en alquiler en Donibane Lohizune. (P. BELTZAIZ)

El decreto 2023-981 del 23 de octubre da rango legal al proyecto de experimentación sobre una regulación reforzada de los alquileres en las 24 localidades incluidas por la Mancomunidad Vasca en la llamada zona tensionada.

La demanda data de noviembre de 2022 y afecta a las localidades labortanas de Ahetze, Angelu, Arbona, Arrangoitze, Azkaine, Basusarri, Baiona, Biarritz, Bidarte, Biriatu, Bokale, Donibane Lohizune, Getaria, Hendaia, Hiriburu, Jatsu, Lehuntze, Larresoro, Milafranga, Mugerre, Urketa, Urruña, Uztaritze y Ziburu.

De acuerdo con el decreto, de cuya publicación en el boletín oficial del Gobierno francés informó ayer la Prefectura de Pirineos Atlánticos, se autorizará a la institución de Ipar Euskal Herria a «experimentar una fórmula de regulación de los precios de los alquileres» al amparo de la Ley ELAN (2018).

La aparición del decreto da carta de naturaleza, con sensible demora, a la intención de la Mancomunidad de intervenir de manera urgente en la crisis de la vivienda y le dotará de un instrumento mayor, al permitirle delimitar precios.

No es el único instrumento del que hará uso la institución. Fue en marzo de 2022 cuando la Mancomunidad aprobó por práctica unanimidad un «sistema de compensación», que se aplica en la zona tensionada desde el pasado 1 de marzo.

La medida obliga a los propietarios de viviendas que se ofertan para alquileres de corta duración a sacar al mercado un segundo bien destinado al mercado anual de alquiler. A ese dispositivo se suman las limitaciones a los alquileres turísticos o las decisiones adoptadas por una decena de ayuntamientos para subir los impuestos a segundas residencias, animados por la Mancomunidad, que aspira a generalizar las medidas que rigen en la zona de tensión.

RECOGER DATOS.

La Prefectura se felicitó ayer de la puesta a disposición de la institución vasca de «un nuevo mecanismo que le permitirá completar sus políticas públicas en favor de la vivienda». Alda, por su parte, valoró que ese dispositivo experimental para el control de los alquileres «ha sido posible gracias a la movilización de la sociedad y de los electos de la Mancomunidad».

La asociación espera que ese sistema que delimitará anualmente el precio del alquiler, sumado a la medida de compensación ya en vigor, «sirva para enfriar los precios del mercado y poner coto a ciertas prácticas especulativas».

Con la publicación del decreto se abre un periodo de estudio de mercado con vistas a definir «a lo largo de 2024» los montantes de referencia del alquiler en función de los m2 y la localización del bien.