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Plante vasco, catalán y gallego ante el nuevo intento de reciclar la monarquía española

La monarquía española protagonizó ayer un nuevo intento de regeneración con la jura de la Constitución por parte de la heredera, Leonor de Borbón. Las formaciones soberanistas vascas, catalanas y gallegas no acudieron. EH Bildu, ERC y BNG apuntaron que la monarquía es «heredera de la dictadura y pieza fundamental del régimen».

Leonor de Borbón, junto a su padre, Felipe de Borbón, durante el acto de ayer. (Pierre Phillipe MARCOU | AFP)

La monarquía española ensayó un primer intento de regeneración en 2014 con la sustitución de Juan Carlos de Borbón, envuelto en decenas de escándalos, por su hijo Felipe. Una década después, pone la primera piedra para un nuevo reciclaje que vuelva a reforzar la adhesión a este régimen: la jura de la Constitución por parte de la heredera, Leonor de Borbón, que busca ir asentando una tercera generación, a cuyo frente estaría además una mujer.

El acto protocolario trajo consigo una parafernalia españolista en la que, por ejemplo, las principales fuentes de Madrid se tiñeron con la bandera rojigualda. Y se intentaron acuñar conceptos forzados como «Leonormanía», intentando así recrear una espiral de simpatía popular hacia la heredera española.

El acto en sí se limitó a un juramento en el Congreso. «Juro desempeñar fielmente mis funciones, guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes, respetar los derechos de los ciudadanos y de las comunidades autónomas y fidelidad al rey», fue el texto pronunciado por la heredera al trono sobre el mismo ejemplar de la Carta Magna sobre el que acató su padre, Felipe de Borbón, en 1986. En el intento de dar máximo amparo al estreno de la princesa, incluso se difundieron las tomas falsas de aquel juramento.

Al acto principal le siguió un discurso de la heredera borbónica, que cumple este ritual al llegar a los 18 años, ya en otro edificio oficial. Su intervención pivotó en torno al «deber» y al «interés general» de los españoles. «Les pido que confíen en mí».

Al evento no acudió ninguna formación independentista ni soberanista. Junts, ERC, PNV, EH Bildu y BNG expresaron con ello su rechazo a la monarquía española y su demanda de repúblicas catalana, vasca y gallega. Tampoco asistieron, por su condición republicana, Podemos ni IU. Y no estuvo en Madrid el lehendakari de la CAV, Iñigo Urkullu, aunque sí se desplazó la navarra, María Chivite.

EH BILDU, ERC Y BNG

En la mañana de ayer, EH Bildu, ERC y BNG presentaron una declaración conjunta con la que trasladaron «la voz y el sentimiento de millones de personas de los Països Catalans, Euskal Herria y Galiza que ni reconocen ni amparan el régimen monárquico español. Monarquía heredera de la dictadura y pieza fundamental del régimen que ha supuesto y aún supone un cerrojo a las aspiraciones nacionales y sociales de nuestras naciones».

«No participaremos del enésimo intento de perpetuar una institución arcaica, opaca, que ha amparado sistemáticamente la corrupción y que resulta contraria a los intereses populares como es la monarquía». Tampoco respaldaron «la legitimación de la propia Constitución española que ni reconoce ni respeta los anhelos presentes y futuros de las mayorías sociales de nuestras naciones».

Ahondaron en ello con tres consideraciones más: «La monarquía española y sus miembros constituyen uno de los máximos exponentes de la negación de los derechos civiles, políticos y nacionales que asisten a nuestros pueblos y su ciudadanía, así como la expresión máxima de la desigualdad, los privilegios y la impunidad frente al resto de ciudadanos y ciudadanas»; «Ni el rey ni sus herederas cuentan con la legitimidad de nuestras sociedades y, en consecuencia, no les reconocemos ninguna función política ni institucional. La imposición y la negación ha sido la única receta dirigida desde esta institución hacia nuestros pueblos, como quedó de manifiesto en el discurso pronunciado el 3 de octubre contra la ciudadanía catalana y su ejercicio de decisión democrático»; y «La monarquía, independientemente de quién la encabece, representa las élites frente a la mayoría; representa los privilegios frente a los derechos; representa la impunidad frente a la justicia; representa la avaricia frente a la igualdad y representa la imposición frente a la democracia. Valores todos ellos contrarios al sentir mayoritario de nuestras sociedades y las mayorías sociales del Estado».

«Los valores republicanos de igualdad, justicia, libertad y democracia que tanto la ciudadanía de nuestras naciones como las mayorías populares del Estado compartimos solo vendrán de la ruptura con la herencia monárquica y el régimen que de la misma emana», cerraba el comunicado de estas tres fuerzas.

RECHAZO DE SORTU

Por su parte, Sortu, a través de las redes sociales, recordó que «tal día como hoy [por ayer] se aprobó la Constitución del 78» y que de aquel modo, «de la noche a la mañana, los falangistas se convirtieron en demócratas».

Esta formación señaló que «pusieron a España por encima de todas las demás naciones, negando la condición de nación de Euskal Herria», antes de señalar que «Leonor es descendiente del régimen opresor». Frente a ello, reivindicó que «la nuestra es la República Vasca».