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PNV y PSE modelan cómo encajar el Museo Guggenheim en Urdaibai

PNV y PSE continúan trabajando en los despachos para conseguir el desembarco del Guggenheim en Urdaibai. El Gobierno español ha dado un paso importante al reducir la protección de la franja litoral que los ecologistas pretenden que los juzgados no permitan.

Manifestación que reunió en octubre a miles de personas en Gernika contra el proyecto. (Gorka RUBIO | FOKU)

PNV y PSE siguen dando pasos en las instituciones en las que gobiernan para que el Museo Guggenheim desembarque en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai. Quedan años de tramitación, aunque quienes cuestionan el proyecto no parecen dispuestos a quedarse de brazos cruzados.

Sin duda, la decisión de la Dirección de Costas de rebajar la protección de la franja litoral a 20 metros, cuando antes era de 100, es el hito más importante aunque no el único pues la Diputación presidida por Elixabete Etxanobe continúa movilizando todos los recursos en sus manos mientras en ayuntamientos como el de Murueta, gobernado por los jeltzales, se trabaja en la modificación del Plan General para encajar el polémico proyecto.

No hay discusión sobre la necesidad o no de levantar una segunda sede del Guggenheim en Bizkaia, tal y como diferentes agentes y ciudadanía en general demandan. Tampoco se responde al emplazamiento de siete consistorios que reclaman transparencia y un debate sosegado para consensuar un modelo de desarrollo para Busturialdea.

Es un tema que «incomoda» a pocos meses de una nueva cita con las urnas, conscientes sus promotores que quedan años de tramitación y proyectos asociados que ejecutar como la demolición de la cubertera Dalia, la otra sede del proyecto junto a los astilleros de Murueta.

Que los condicionantes que rodean a la Reserva de la Biosfera no son para el PNV un obstáculo para seguir adelante con el proyecto era conocido, no así la apuesta del Gobierno de Pedro Sánchez. En la campaña a las elecciones forales, la candidata a diputada general por el PSE, Teresa Laespada, manifestó que aguardaba a que el Ministerio de Transición Ecológica se pronunciase y la decisión ha sido rebajar la protección del solar de los antiguos astilleros de Murueta. Los ecologistas daban por hecha esa decisión.

NUEVO DESLINDE A ESTUDIO

Zain Dezagun Urdaibai no da la batalla por perdida y ha presentado hace unos días un escrito solicitando a la Dirección de Costas la revisión de la línea de deslinde marítimo terrestre vigente desde 2004, que incluye partes sustanciales de las marismas y marjales ganadas en los últimos años al estuario del río Oka, en los términos municipales de Murueta, Forua y Gernika-Lumo, y en menor incidencia Kortezubi. Inicia la vía administrativa, antes de acometer la judicial con la que busca que se cumpla la ley.

La asociación en defensa del medio ambiente de Busturialdea señala en particular el espacio colonizado en 1943 por los astilleros, «que ocupaba en su origen 0,95 hectáreas y ahora ha arrasado y contaminado 4,2 hectáreas del humedal». Apunta a otras zonas al oeste de la línea férrea, «que se inundan con las mareas normales».

Asimismo, menciona, las 5,9 hectáreas ocupadas por la depuradora de Gernika-Lumo y las instalaciones deportivas con edificaciones anexas del complejo Urbieta, «edificadas no solo sobre las vegas y marjales de Santana, sino encima de uno los brazos del río Oka en esta zona marismeña, sin que nos conste concesión estatal ninguna, y con unos usos humanos de alta intensidad en plena zona de especial protección, exclusión total y protección europea de aves. Zona esta que se pretende legalizar, cuando desde el Ayuntamiento de Gernika-Lumo se ha actuado en contra de las normas vigentes por la vía de hecho desde 1979».

Zain Dezagun Urdaibai incide en que los proyectos de obras en el litoral deben incorporar una evaluación de los efectos del cambio climático, presentando quienes consigan la futura concesión proyectos de regeneración y lucha contra el cambio climático correspondiente al uso de que se trate. En el caso del Guggenheim Urdaibai, entienden que se está obviando el aumento del nivel de mareas y regresión de la costa que se prevé.