Los azules superan al Zaragoza y a las pintadas fascistas

No hay mejor forma que superar un ataque fascista de los aficionados ultras del Zaragoza que ganando el partido con un gol de falta en el minuto 97. Así es cómo derrotó ayer el Amorebieta a un equipo maño que buscaba reengancharse a los puestos de promoción para el ascenso y que con esta derrota dice prácticamente adiós, para enfado de su propio aficionado.

El karma siempre suele llamar a la puerta, y después de que el autobús del Amorebieta amaneciera con pintadas fascistas -«Vascos perro», esvásticas y signos de disparo-, los de Jandro lograron una victoria vital para no desengancharse de la lucha por la permanencia, algo que parece complicado pero por la que no tiran la toalla.

Son últimos en la tabla, con 24 puntos después de que Morcillo enganchara un buen disparo de falta para alargar la buena racha de cuatro partidos sin perder, a siete puntos de la salvación. Complicado reto al que se enfrentan en las 11 jornadas que restan pero que afrontarán con sensaciones muy opuestas a las de hace un mes. Parece que no está todo dicho en el seno del Amorebieta.