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LA BESTIA EN LA JUNGLA

La espera interminable


Dirigida por Patric Chiha y basada en la obra homónima de Henry James, “La bestia en la jungla” nos hace partícipes de una intrigante trama donde la anticipación de un evento enigmático se convierte en el eje central. La película nos conduce a una discoteca donde cada sábado, durante casi tres décadas, se llevan a cabo peculiares encuentros bajo la dirección de una misteriosa mujer interpretada por Beatrice Dalle.

PERSONAJES EN CONTRASTE

En este escenario singular, dos personajes principales se encuentran: John Marcher (Tom Mercier), obsesionado con la idea de que un evento trascendental marcará su vida, y May Bartram (Anaïs Demoustier), quien a pesar de la soledad que envuelve a Marcher, irradia una emotividad cautivadora.

La tragedia de John reside en su incesante espera por algo grandioso, lo que le impide disfrutar de las experiencias y conexiones significativas que podrían haber enriquecido su vida. Esta dolorosa revelación lo confronta con la cruda realidad: ha malgastado años en una búsqueda infructuosa.

Las fiestas de disfraces en este lugar extraño sirven como escenario para bailes excéntricos y sensuales. La música electrónica se convierte en un himno de amor en medio de las relaciones que se forman y se deshacen al ritmo de las noches de sábado.

Beatrice Dalle aporta un elemento crucial al romper la monotonía narrativa al asumir el papel de una narradora intrigante. Su personaje parece trascender los límites del tiempo y el espacio, influyendo en los eventos de manera sutil y enigmática. La edición fragmentada de la película desafía la linealidad temporal convencional, distorsionando la percepción del tiempo dentro de la narrativa y generando una sensación de incertidumbre en el espectador.