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Nueve años de salario íntegro para pagar una vivienda en la CAV

Nueve años de salario. Este es el dinero que debían invertir los residentes en la CAV para pagar una vivienda en 2023, tres meses más que en 2022. Los datos de Infojobs y Fotocasa constatan que el esfuerzo es mayor en Gipuzkoa, donde es necesario una década de sueldo.

Viviendas en construcción en Zarautz. (Gorka RUBIO | FOKU)

En la CAV era necesario dedicar íntegramente el sueldo bruto de 108 meses, es decir nueve años, al pago de la hipoteca de una vivienda comprada el año pasado, según el estudio “Relación de salarios y la compra de vivienda en 2023”, basado en datos de los sueldos medios de las ofertas de empleo de InfoJobs y en los precios medios de la vivienda de segunda mano en venta del Índice Inmobiliario de Fotocasa.

El estudio revela que, en 2023, en la CAV, los sueldos aumentaron un 2,9%, mientras que el precio de la vivienda de segunda mano subió un 6,1%. Así, el precio de la vivienda en venta se situó en diciembre en 3.091 euros por metro cuadrado, mientras que el salario bruto medio registrado por InfoJobs fue de 27.431 euros, 2.286 euros brutos mensuales si se divide en 12 pagas.

Los datos indican que en tan solo un año los ciudadanos tienen que destinar tres meses más que el año anterior al pago de su hipoteca en la CAV. Un dato que varía por herrialdes. Gipuzkoa ha pasado de los 9,1 años en 2022 a los 9,9 años en 2023, incrementado su hipoteca en ocho meses. Le sigue Bizkaia, que pasa de los 8,6 años en 2022 a los 8,8 años en 2023, mientras que en Araba se redujo el tiempo necesario, al pasar de los 8,5 años en 2022 a los 7,8 años en 2023.

La directora de Estudios y portavoz de Fotocasa, María Matos, explicó ayer que el esfuerzo salarial está «en las cotas más altas de la última década». Además, reconoció que «evidentemente el precio de la vivienda no ha crecido al mismo ritmo que los salarios desde la recuperación económica de 2014», y consideró «resaltable» que el encarecimiento haya «aumentado exponencialmente en los últimos dos años». A su juicio, la subida de los tipos de interés en 2022 «avivó» una demanda de compra «intensa» que a día de hoy «presiona a la oferta tensionando los precios al alza».