2024 EKA. 14 La apatía del electorado beneficia a la ultraderecha en Grecia y Chipre Las principales formaciones de Grecia y Chipre perdieron apoyo en las elecciones europeas. La baja participación en Grecia favoreció la consolidación de la ultraderecha y aupó a la polémica Afrodita Latinopoulou. En Chipre, la situación es preocupante para los partidos tradicionales: un youtuber obtuvo el 19% y los neonazis de ELAM, el 11%. El primer ministro griego y líder de Nueva Democracia, Kyriakos Mitsotakis. (Aris MESSINIS | AFP) M. FERNÁNDEZ IBÁÑEZ ATENAS Los resultados de las elecciones europeas en Grecia solo han dejado satisfecha a la ultraderecha. Tres formaciones a la derecha de la gobernante Nueva Democracia (ND) estarán en Bruselas, mientras que los partidos tradicionales han perdido apoyo por una abstención récord del 41%, 18 puntos menos que en 2019. De los 21 representantes griegos en Bruselas, siete serán de ND (28,3%); cuatro, de Syriza (14,9%); tres, del Pasok (12,7%); dos, de Solución Helena (9,3%); dos, del Partido Comunista (9,2%); uno, de Victoria (4,3%); uno, de Rumbo a la Libertad (3,4%) y uno, de Voz de la Razón (3%). Tras cosechar su peor resultado electoral como presidente de ND, el primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, reconoció que no ha conseguido el objetivo de igualar el 33% de 2019, aunque apuntó que la diferencia entre la primera y la segunda formación es la mayor en una cita europea en Grecia, algo que ocurrió también en las parlamentarias de 2023: entonces ND conquistó la mayoría absoluta con más del 40% de los votos. Más allá de la abstención, el problema para Mitsotakis es que los partidos de ultraderecha tienen votantes fijos y es probable que, por desgaste del propio Gobierno, sumen nuevos adeptos, lo que podría obligar a ND a pactar con ellos tras los comicios en 2027. La ultraderecha obtuvo más del 18% de los sufragios y tres formaciones entraron en el Parlamento Europeo: Solución Helena, Victoria y Voz de la Razón (VR). Es Solución Helena, dirigida por Kyriakos Velopoulos, la gran triunfadora: ha doblado su apoyo. Mención aparte merece la formación personalista VR, dirigida por Afrodita Latinopoulou, que ha conseguido su escaño por los pelos y que refleja que existe espacio para los discursos «anti-woke»: en las redes sociales ha mostrado su rechazo a las mujeres que se dejan crecer el pelo en cualquier parte del cuerpo que no sea la cabeza. De tradición derechista, Latinopoulou fue expulsada de ND en 2022 por unos comentarios despectivos contra las personas obesas. Su discurso incluye los dogmas de la ultraderecha: el rechazo al migrante y el apoyo a la familia tradicional, por lo que está en contra del aborto y de los derechos para las comunidades no normativas. A sus 33 años, la diferencia entre ella y otras figuras ultraderechistas es la edad y el género: es joven y mujer, y tal vez por eso incide más en el culto al aspecto físico. SOCIALDEMOCRACIA HELENA Los resultados muestran un estancamiento de la socialdemocracia, bueno para Syriza, que de nuevo pierde votos y diez puntos, pero que frena su sangría tras la salida de Alexis Tsipras; y malo para el Pasok, que no consigue convertirse en segunda fuerza pese a las turbulencias de la formación dirigida por Stefanos Kasselakis. Porque Syriza lleva un año en crisis: tras la elección de Kasselakis como líder surgieron voces contrarias que terminaron en una escisión, la de Nueva Izquierda, que se ha quedado en el 2,4%. Kasselakis da portazo a la crisis interna y gana tiempo para implementar el giro socialdemócrata en Syriza. Asentada como principal oposición a ND, tendrá que establecer una candidatura integradora en la que tiene que atraer al Pasok y recuperar el apoyo de la izquierda. Y no será fácil: el Partido Comunista, que sigue creciendo, mantiene una posición contraria a forjar alianzas si existen diferencias ideológicas, y las hay, mientras que la izquierda renovadora que representan Mera25 (2,5%) y la Nueva Izquierda, que no superaron el corte electoral, mantienen disputas con el personalista líder de Syriza. Chipre: la eclosión de un youtuber y el auge neonazi En Chipre, las elecciones han dejado la sorpresa de Fidias Panayiotou. Este youtuber de 24 años conquistó el 19% de los votos, más del doble de lo que vaticinaban las encuestas, a escasa distancia de las formaciones tradicionales: la derechista DISY, que obtuvo el 24%, y el izquierdista AKEL, que sumó el 21%. Haciendo uso de un lenguaje directo propio de la mayoría de youtubers, Fidias ha conseguido más de dos millones y medio de seguidores desde que comenzó su andadura como creador de contenidos en 2019. Su salto a la fama se produjo cuando estableció la misión de conseguir dar un abrazo a Elon Musk. Lo consiguió, y ahora tiene ante él un reto mayor: que su fuerza electoral no termine por ser una anécdota o un proyecto efímero. Además, es preocupante el auge neonazi en el extremo oriental de la Unión Europea: ELAM, fundado en 2008, consiguió el 11,2% y tendrá por primera vez un representante en Bruselas. Es su mejor resultado histórico y confirma su tendencia ascendente: en las elecciones parlamentarias de 2021 obtuvo el 6,8% y en las elecciones europeas de 2019 alcanzó el 8,3%.M.F.I.