2014 IRA. 17 UPN, obligado a rehacer el plan de residuos por basarse en la incineración La aparición de una nueva normativa europea fuerza a UPN a rehacer el plan de residuos que elaboró a finales de 2010. Con las exigencias de niveles de reciclaje la UE, no es viable construir una incineradora nueva. Pese a todo, la quema de basuras en la cementera no se descarta. Aritz INTXUSTA El consejero de Administración Local de Nafarroa, José Javier Esparza, anunció ayer que el actual Plan Integrado de Gestión de Residuos de Navarra (PIGRN) no sirve, porque su apuesta por la incineración no es viable ni compatible con las nuevas directivas europeas. El consejero tendió la mano al resto de partidos para sacar adelante un nuevo plan, asegurando que el anterior PIGRN no fue un error y que su apuesta por la incineración fue buena, que lo que ha cambiado ha sido «la realidad». Esparza aseguró en el Parlamento que UPN no ha tenido «ninguna obsesión compulsiva» con incinerar, aunque el PIGRN apostaba por quemar el 90% de los residuos que no lograran reciclarse o reutilizarse. El aparente giro copernicano en cuanto al empleo de la incineración podría dejar al margen la incineradora de Olatzagutia. El PIGRN contemplaba la creación de una nueva incineradora, cuyo coste ronda los 200 millones de euros. Esparza aseguró a este respecto que ese proyecto es inviable, porque se necesitarían 128.000 toneladas de residuos al año y con las tasas de reciclaje que la UE va a exigir con la nueva normativa, Nafarroa no produce tanta basura. No obstante, el consejero insistió en que seguirá habiendo un «resto» y que habrá que hacer algo con ello. En definitiva, no se construirá ninguna incineradora nueva, pero hay una puerta abierta a que la cementera queme basuras si adapta los hornos. Samuel Caro, portavoz del PSN, añadió que a la nueva directiva europea se suma también el varapalo judicial que supuso la sentencia en contra del mismo por haberlo redactado sin un emplazamiento para la incineradora. El PSN es copartícipe de la elaboración del plan de residuos (elaborado a finales de 2010) y urgió a Esparza a aprobar un plan nuevo antes de que termine la legislatura. En busca de un consenso Este frenazo a la incineración impuesto por Europa requerirá también de técnicas sustitutivas, que Esparza avanzó que ya están siendo valoradas por técnicos del Gobierno. El PSN, por su parte, sostiene que quiere que se implementen en los centros de tratamiento actuales. Víctor Rubio, de Bildu, dio la bienvenida a UPN a la «coordinadora del no» y les recordó que se les está advirtiendo desde hace años de que iban por mal camino. Aralar cree que no tienen los 200 millones para construir otra incineradora además de la de Olatzaguria. No obstante, la oposición se mostró de acuerdo en trabajar un nuevo modelo de gestión de residuos. PUERTA A PUERTA. El consejero pasó de puntillas por las tasas de recogida selectiva de basura en Sakana después de implantar el puerta a puerta. Esparza aseguró que intentarán mejorar los ratios de reciclaje, pero «sin imponer nada a nadie».