«Lo importante de la Liga ACB empieza en febrero», reza un dicho. No es del todo cierto, pero la verdad es que la Copa ejerce de hito de la temporada. A partir del «torneo del KO» la mirada está puesta en la jornada 34, última de la Liga Regular, que en esta campaña 2014/15 se celebrará el fin de semana del 23 y 24 de mayo, y en el que se decidirá la suerte de los que pelearán por el título de Liga, los que perderán la categoría y los que den por acabada la campaña.

Pero para llegar hasta ahí, todavía hay casi tres meses de competición; es decir, mucho tiempo para que pase cualquier cosa, buena o mala. Como se ha demostrado a lo largo de la primera vuelta, confiar todo quehacer al sprint final, no es la mejor fórmula de éxito.

Laboral Kutxa Baskonia es el equipo, de entre los tres representantes vascos de la Liga ACB, que más se juega, numérica y simbólicamente. Por un lado, los gasteiztarras se juegan sus opciones en la competición doméstica y en la Euroliga, y deberán encarar partidos claves en los próximos días. Para empezar, mañana mismo los de Ibon Navarro visitan la cancha de un Anadolu Efes que llega a la segunda vuelta del Top 16 de la Euroliga con la confianza por las nubes, después de haberse impuesto en la Copa turca, con un viejo conocido, Thomas Heurtel, como MVP y héroe de los entrenados por Dusan Ivkovic.

«El Partido»

La escuadra otomana ocupa la cuarta plaza del grupo F del Top 16, con un balance de 4-3 después de la primera vuelta, un triunfo más que un Laboral Kutxa Baskonia que se sitúa inmediatamente después con un balance de 3-4. Precisamente, la derrota ante Anadolu Efes por 67-72 en la primera jornada de esta segunda fase es la diferencia entre baskonistas y otomanos, de modo que los de Ibon Navarro preparan el encuentro de mañana como una final.

«Este partido es El Partido», afirmaba el propio Ibon Navarro a la hora de planificar el parón baskonista en su ausencia copera. Los gasteiztarras han enfocado este paréntesis competitivo para intentar asaltar el Abdi Ipekçi Arena. «Tenemos una semana muy importante. Primero en Estambul. Hemos ganado allí ante Galatasaray y el año pasado jugamos también bien contra Efes. Hemos tenido diez días para preparar el encuentro y el equipo ha trabajado muy bien», declaraba Fabien Causeur durante la semana.

El escolta francés advertía, asimismo de la presencia y las «ganas» de Heurtel. «Nos enfrentamos a un jugador que conocemos muy bien y creo que él tiene muchas ganas de jugar contra el Baskonia. Sabemos que va a ser un partido muy difícil pero el equipo está preparado», dijo.

Bertans contra Bertans

Pero Laboral Kutxa Baskonia no debe centrarse únicamente en la Euroliga. Sin ir más lejos. Solo distarán 46 horas -las que van de las 20.00 de mañana a las 18.00 del domingo 1 de marzo- para cuando los de Ibon Navarro, previo traslado desde Estambul, comparezcan en Miribilla ante Bilbao Basket.

Los gasteiztarras han encadenado un par de victorias que, al fin, los han asentado entre los ocho primeros, pero empatados con el noveno, el CAI Zaragoza, y solo una victoria más que Iberostar Tenerife. Mientras, los hombres de negro esperan evitar la temida «resaca» copera, un bajón bastante habitual entre equipos que acaban la primera vuelta entre los ocho mejores, sobre todo si logran ese objetivo por sorpresa. Pero ¿qué mejor forma de olvidar lo pasado que ponerse otro objetivo y perseguirlo? He ahí la idea de los pupilos de Sito Alonso.

«Hemos tenido tres días libres para descansar, olvidar la Copa y seguir pensando en la Liga», declaraba al respecto Dairis Bertans. El «cohete letón» declaraba durante la semana que «nuestro objetivo ahora es ganar cada partido. Estamos en el play off y vamos a intentar ganar lo máximo que podamos».

La escuadra bilbaina ocupa la cuarta plaza liguera con cuatro victorias de margen respecto a la novena posición del CAI, pero es cierto que en el último mes varios de los jugadores no atraviesan su mejor momento, como puede ser el caso de Raül López, mientras que otros, como el propio Bertans o Hervelle, han de ir hacia arriba tras superar sus lesiones. Por ello, el pronóstico no se presenta tan claro como hace unas semanas respecto al domingo, ni mirando al próximo duelo a domicilio de los hombres de negro, en la cancha del UCAM Murcia.

De cara al derbi, el escolta letón, que intentará tomarse la revancha sobre su hermano Davis del partido de la primera vuelta, un duelo que terminó con triunfo baskonista por 86-74, anunciaba además, que se llevará los ánimos de la familia.

«Esta semana he hablado con mi madre, le pregunté cómo lo ve y me ha dicho que en este partido quiere que gane el Bilbao Basket. También va a apoyar a mi hermano porque se lo merece, pero que quiere que esta vez ganemos nosotros».

Mirando a partir del Palau

Con un balance de 7-14, Gipuzkoa Basket tiene un margen de dos victorias respecto al descenso. Pero la verdad es que el sábado Andorra y Manresa juegan entre ellos y el domingo GBC juega en el Palau. Así pues, lo más probable es que ese margen se vaya a estrechar. El partido siguiente es en casa, pero ante un Obradoiro que ha ganado en sus cuatro visitas a Illunbe, lo cual tampoco tranquiliza.

En todo caso, Jordi Grimau prefiere ver el vaso medio lleno. «No renunciamos a ganar en el Palau Blaugrana. Dos semanas malas nos pueden poner en muy mala situación, pero dos semanas muy buenas nos acercarían a nuestro objetivo. Todo está cerca y lejos a la vez».