La banca española necesita entre 51.000 y 62.000 millones de euros
La banca española necesita entre 51.000 y 62.000 millones de euros de capital para afrontar un escenario estresado de máxima exigencia, según se desprende de la evaluación independiente del sector que han dado a conocer el subgobernador del Banco de España, Fernando Restoy, y el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre.
La valoración de las consultoras Oliver Wyman y Roland Berger ha cifrado entre 51.000 y 62.000 millones de euros las necesidades de capital de la banca española, según han informado el subgobernador del Banco de España, Fernando Restoy, y el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre.
Esta horquilla es más amplia que los 40.000 millones de euros de necesidades de capital calculados por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y puede servir de base para la petición de rescate a la banca solicitada por el Gobierno español a la Unión Europea.
Según las estimaciones de Roland Berger, en el escenario más adverso, el grueso del sistema financiero español -14 entidades- necesita unos 51.800 millones, mientras que para Oliver Wyman harán falta entre 51.000 y 62.000 millones de euros.
Todo ello para mantener una ratio de capital de al menos un 6%, en una hipótesis en la que la caída acumulada del PIB sea del 6,5% hasta 2014, frente al 5,4% del ejercicio realizado recientemente por el FMI.
En ese escenario, el precio de la vivienda caería un 26,4% (frente al 23,5% del Fondo Monetario Internacional), con lo que desde el punto máximo de la burbuja se desplomaría entre un 55% y un 60%, y el del suelo, entre un 85 y un 90%.
Las entidades de mayor tamaño, Banco Santander, BBVA y CaixaBank, no necesitarían capital adicional ni siquiera en el escenario adverso, mientras que un tercer grupo, en el que podría haber siete entidades, podría conseguirlo por sus propios medio o con algún tipo de ayuda pública «moderada».
Restoy ha especificado que los problemas se concentran sobre entidades que ya han sido objeto de actuaciones por parte de las autoridades españolas a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
Tras las pruebas de estrés, el 31 de julio se conocerá la auditoría a la banca española encargada a PwC, KPMG, Ernst & Young y Deloitte.
Adicionalmente, se iniciará un nuevo ejercicio que terminará en septiembre para afinar las necesidades de capital de las entidades con déficit en el escenario de estrés y ello servirá para tener las necesidades exactas de capital con la información individualizada.
Eso obligará a las entidades a presentar sus planes de recapitalización y, en el caso de que aspiren a lograrlo por sí solas, tendrán nueve meses para ello.
El Ejecutivo español ha acordado con Bruselas una ayuda de hasta 100.000 millones de euros para recapitalizar la banca y tras los resultados de estas pruebas de esfuerzo solicitará formalmente la cantidad que precisa el sistema financiero en los próximos días.
Al respecto, Restoy ha asegurado la cantidad acordada con Bruselas «es un margen amplísimo» para recapitalizar el sistema financiero español.