De los 247 millones que se ha encarecido el TAV de Lakua, 132 han sido el último año
Las obras del tramo guipuzcoano del TAV se han encarecido ya 247 millones de euros sobre los precios adjudicados, lo que supone un incremento del 15,7%. Lo llamativo es que más de la mitad de ese sobrecoste se ha producido en el último año. Entre el 30 de abril de 2013 y la misma fecha del 2014 ha subido 85 millones y ya se anuncian otros 47.
Los diecisiete tramos del ramal guipuzcoano del TAV que el Gobierno de Lakua tiene en obras -todavía faltan dos por licitar- se adjudicaron por 1.575,3 millones de euros. A día de hoy, con las modificaciones realizadas y con las que están en previsión, se calcula ya que costarán no menos de 1.822,62. Es decir, son 247,32 millones más de los inicialmente previstos.
Pero llama poderosamente la atención que más de la mitad de ese incremento del coste de las obras se ha producido en poco más de un año. Según los últimos datos remitidos por el Departamento de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio al Parlamento, a 30 de abril de 2013 el presupuesto de la obra era de 1.690,3 millones de euros. Es decir, para entonces se había encarecido 115 millones de euros. Hay que decir que de esos 115 millones de más, 32,5 millones se debían a las subidas del IVA, primero del 16% al 18% y después al 21%. Sin ello, la subida por modificaciones y ajustes de precios hubiera sido de 82,5 millones desde 2009 hasta 2013.
Según los datos ofrecidos ayer por la consejera Ana Oregi en la Cámara autonómica, el presupuesto a 30 de abril de 2014 es de 1.775,23 millones de euros. Lo que supone que en el último año se ha producido un encarecimiento de la obra de nada menos que 85 millones de euros, más que la suma de los cuatro años anteriores. Pero además la consejera Ana Oregi adelantó que los cambios que hay en previsión suponen ya otros 45,5 millones más de euros.
La consejera aseguró que todas estas subidas están debidamente controladas por Madrid y Lakua y obedecen a revisiones de precios previstos en los contratos y también a los imprevistos que siempre ocurren en este tipo de grandes obras que son de una enorme complejidad.
EN CIFRAS
Presupuesto de adjudicación: 1.575,3 millones
Presupuesto a 30/4/2013: 1.690 millones
Presupuesto a 30/4/2014: 1.775,2 millones
Presupuesto con nuevos cambios: 1.822,6 millones
Encarecimiento por el momento: 15,7%
Importantes preguntas sin respuesta, pero promesas de transparencia en el futuro
La comparecencia de ayer fue solicitada por EH Bildu a raíz de la operación judicial contra Adif y la empresa Corsán-Corvián por supuesto fraude en las obras del AVE en Barcelona. La consejera Ana Orue llegó a la Cámara con tres objetivos claros. Por un lado, demostrar que en el tramo de esta firma en la «Y vasca» no hay ningún tipo de irregularidad, ni tampoco en cualquier otro tramo dependiente de Lakua, sea cual sea la adjudicataria. Tanto la consejera como el portavoz del PNV defendieron la lógica de los sobrecostes que se van produciendo a lo largo de las obras.
Un segundo objetivo era la promesa de «transparencia obsoluta» con el anuncio de remisión de un informe trimestral al Parlamento sobre el estado de las obras. Este objetivo se vio poco acompañado por los hechos. Muchos de los datos que ayer ofreció la consejera habían sido solicitados por EH Bildu el 8 de mayo y debían haber sido remitidos al Parlamento el 17 de junio. Sin embargo, el Departamento pidió una prórroga y se prevé que lleguen hoy. Dada la plolija exposición de ayer, todo hace pensar que los datos estaban ya elaborados, pero se maniobró para que los solicitantes no pudieran tenerlos estudiados. De hecho, durante la comparecencia fueron expuestos a través de una pantalla, pero no entregados para su manejo.
Oskar Matute explicó que su grupo había estado tentado de pedir el retraso de la comparecencia, porque la triquiñuela del Departamento no les permitía trabajar en igualdad de condiciones. En cualquier caso, EH Bildu preguntó sobre cuestiones que tienen que ver con el precio de las obras, como las canteras ilegales para ahorrar en cemento o la falta de seguridad que puede provocar derrumbes como el del túnel de Zumarraga. Sobre lo primer dijo que era normal; sobre lo segundo, calló.
El último anuncio fue que a partir de ahora, cuando quedan solo dos tramos por licitar, el Gobierno hará caso a las recomendaciones que el TVCP viene haciendo desde 2009 sobre los criterios obejtivos en las adjudicaciones. I.I.