Bomberos navarros denuncian los recortes de personal con un simulacro de rescate
Bomberos de la Agencia Navarra de Emergencias han sacado hoy a la calle su protesta, escenificando, en la plaza del Ayuntamiento de Iruñea un simulacro de rescate con el que han querido dejar patente ante los ciudadanos la disminución de personal registrada a raíz de los recortes que se han aplicado.
Convocados por la comisión de personal, más de un centenar de bomberos, con sus atuendos de trabajo, se han concentrado esta mañana ante el Ayuntamiento de Iruñea tras una pancarta en la que se leía, en euskara y castellano, «por un servicio público y de calidad» para arropar lo que han calificado como «una espectacular maniobra reivindicativa».
Durante la protesta, varios botes de humo colocados en las ventanas del edificio colindante al Ayuntamiento han dado inicio a un simulacro en el que seis personas simulaban haber quedado atrapadas por el fuego en los balcones y necesitaban ser rescatadas por los bomberos.
Unos bomberos que solo contaban para realizar esta labor con dos efectivos, por lo que han tenido que multiplicar sus esfuerzos para finalizar con éxito su trabajo, que ha recibido el aplauso de los ciudadanos que en ese momento se encontraban en el lugar.
El objetivo de esta movilización, han señalado en un comunicado los convocantes, «no es otro que denunciar el actual modelo de servicio, donde reina la improvisación, falta de definición y dirección estratégica». «Un desgobierno que, sumado a los recortes impuestos, dan como resultado un caos de gestión», han apostillado.
Según han señalado, la mayor consecuencia que está teniendo sobre el servicio los recortes aplicados es la disminución de personal, lo que les está llevando «a trabajar bastantes días bajo los mínimos exigidos en cada parque».
La comisión de personal de la ANE ha considerado «un despropósito y una irresponsabilidad tratar de dirigir un servicio que adolece de bomberos» ya que, ha subrayado, «de nada vale tener recursos técnicos si no se tienen recursos humanos».
Por eso, han querido con esta acción «dar la voz de alarma» a la ciudadanía para denunciar que los responsables de este servicio «están poniendo en peligro la seguridad de los navarros».