Mas y Urkullu denuncian la falta de reconocimiento de la plurinacionalidad en el Estado
El presidente de la Generalitat en funciones, Artur Mas, y el lehendakari Iñigo Urkullu, han denunciado en Barcelona la falta de reconocimiento de la plurinacionalidad del Estado y han afirmado que las últimas elecciones al Congreso «han de ser el punto final a una forma de hacer basada en la imposición y la falta de diálogo».
Mas y Urkullu se han reunido al término del partido amistoso que han disputado en el Camp Nou de Barcelona Catalunya y la selección vasca y al final de la misma la Generalitat ha divulgado un comunicado en el que señala que ambos presidentes mandatarios han analizado la situación política surgida de las elecciones generales del pasado domingo.
Según el comunicado, «han constatado que los problemas del Estado español no solo están vinculados a las mayorías necesarias para formar un gobierno estable en Madrid, sino también y principalmente a la falta de reconocimiento de la plurinacionalidad del propio Estado».
Han afirmado también que las últimas elecciones «evidencian este pluralismo y han de ser el punto final a una forma de hacer basada en la imposición y la falta de diálogo» y que gobernar debería ser ante todo «escuchar a aquellos a los que se pretende gobernar», pero que no ha sido así «las consecuencias son visibles para todos».
Consideran además que los resultados electorales del pasado domingo «deberían ser una oportunidad para solucionar los graves problemas estructurales del Estado».
Mas y Urkullu han alertado de la «acumulación de propuestas de vetos y líneas rojas» en lugar de «planteamiento de soluciones» y han señalado que no se percibe «un verdadero diálogo con ánimo de alcanzar acuerdos, ni un verdadero compromiso en esta cuestión ni por parte de los principales partidos políticos, ni por parte de otros poderes del Estado».
Han considerado en este sentido que el mensaje de Navidad del monarca español Felipe VI «evidenció esta falta de compromiso y de altura de miras».
Desde la realidad propia y diferenciada de Catalunya y la CAV, Mas y Urkullu han constatado «la falta de respuesta a los planteamientos reiterados desde las instituciones representadas por el presidente de la Generalitat y el lendakari o los respectivos parlamentos».
«Elección tras elección, se ponen en evidencia cada vez con más severidad los problemas de estructuración interna de un Estado complejo», que «lejos de arbitrar vías de expresión y solución a las demandas de reconocimiento de la diversidad, se aferra a recorrer el camino inverso, el de la uniformización y la recentralización».
Han puesto como ejemplo, en el caso catalán, lo que califican de «repartición injusta y arbitraria del esfuerzo de ajuste presupuestario», que, afirman, «ha recaído sobre la sanidad, la educación, los servicios sociales y otras materias confiadas a los gobiernos autonómicos, a los que, por otra parte, se ha dejado sin capacidad ni margen de decisión política».
Asimismo, «han reiterado el respeto y la simpatía por sus respectivas propuestas políticas», en la medida que son «opciones democráticas y pacíficas avaladas por amplias mayorías».
Mas y Urkullu han reiterado el compromiso de compartir información e iniciativa política, «en la medida de lo posible», ante el nuevo panorama político español, con «la lógica constatación de que los caminos y los ritmos de las transiciones nacionales han de ser los que cada pueblo elija libremente».
El presidente de la Generalitat y el lendakari han expresado la «necesidad urgente» de consolidar la «incipiente» recuperación económica, dado que la reducción del desempleo y la creación de puestos de trabajo es «la mejor política social posible».