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Detenidas tres personas en relación con la muerte de dos policías en París a manos de un yihadista

La Policía francesa ha detenido a tres personas a las que vincula con Larossi Abballa, identificado como el autor de la muerte con un arma blanca de dos policías en Magnanville, a unos 50 kilómetros al noroeste de París.

Cordón policial en la calle de Magnanville en la que se produjo el ataque contra dos policías. (Thomas SAMSON/AFP)

La policía francesa ha detenido a tres personas de 27, 29 y 44 años a las que relaciona con Larossi Abballa, joven de 25 años abatido esta pasada noche tras matar a un matrimonio de policías en Magnanville.

El fiscal de París, François Molins, ha informado de los arrestos pero no ha dado más detalles al respecto.

Ha indicado que Abballa dijo que con su acto respondía al llamamiento de Al Bagdadi de «matar a los infieles en sus casas con sus familias», y que el atacante sabía que sus víctimas eran policías.

Las fuerzas policiales encontraron en el domicilio de la pareja de agentes una lista de objetivos entre los que había personalidades públicas, periodistas, policías y raperos, ha señalado el fiscal.

El yihadista mató «delante de la entrada de su domicilio» con un arma blanca a Jean-Baptiste Salvint, policía de 42 años y comandante adjunto de la brigada de seguridad urbana de la cercana Mureaux.

«Después secuestró a su compañera, una mujer de 36 años» y al hijo de ambos, de 3 años y medio, ha explicado.

A la mujer también la mató «con arma blanca», mientras que el niño fue rescatado «sano y salvo», aunque en estado de conmoción.

El atacante, de 25 años y nacionalidad francesa, «musulmán practicante que hacía el ramadán», reivindicó su ataque en nombre del Estado Islámico ante la Policía y también en un vídeo de 12 minutos que publicó en Facebook y que envió a «un centenar de contactos», de acuerdo con el fiscal de París.

Los policías que le abatieron durante el asalto «a media noche» a la vivienda encontraron en la casa la citada lista de posibles objetivos, y también «un cuchillo ensangrentado, un corán, una chilaba blanca», entre otros documentos.

Durante el registro de su domicilio en la cercana Mantes-la-Jolie, a solo cinco kilómetros de Magnanville, no se encontraron armas o explosivos en su domicilio, pero sí material informático, ha precisado el fiscal.