Madrid recuerda a los abogados de Atocha en el 40º aniversario de la matanza
Decenas de personas han participado esta mañana en una concentración en recuerdo de los cinco abogados laboralistas muertos en un atentado ultra hace hoy 40 años. Entre los asistentes se encontraban miembros del PCE, Unidos Podemos y EH Bildu, así como del sindicato CCOO.
Cuatro décadas después del atentado ultraderechista que costó la vida a tres abogados laboralistas (Enrique Valdelvira, Javier Sauquillo y Luis Javier Benavides), un estudiante (Serafín Holgado) y un administrativo (Ángel Rodríguez), decenas de personas se han concentrado hoy junto al monumento «El abrazo», de Juan Genovés, para recordar a las víctimas de la matanza. Entre los asistentes, miembros de IU, PCE, Unidos Podemos y EH Bildu, así como del sindicato CCOO.
Antes del acto central, que ha tenido lugar en la plaza Antón Madrid de Madrid (a escasos metros del número 55 de la calle Atocha, donde se perpetró el atentado en 1977), la Fundación Abogados de Atocha y CCOO han realizado dos actos de homenaje en los cementerios de Carabanchel y San Isidro.
En el homenaje, Álvaro Aguilera, secretario general del PCE de Madrid, ha reivindicado la memoria de las cinco víctimas como militantes revolucionarios, rechazando una versión de la historia adecuada a la Transición y defendiendo posiciones rupturistas.
Entre los asistentes al acto se encontraban Alberto Garzón, coordinador general de IU; Rafa Mayoral, secretario de Relación con la Sociedad Civil y Movimientos Sociales de Podemos; Ramón Espinar, portavoz en el Senado de Unidos Podemos; Rita Maestre, portavoz del Ayuntamiento de Madrid; Pablo Padilla, diputado de Podemos en la Asamblea de Madrid; Miguel Urbán, eurodiputado de Podemos, y Jon Iñarritu, senador de EH Bildu.
El 24 de enero de 1977 un grupo de pistoleros de extrema derecha irrumpieron en el despacho de abogados laboralistas de CCOO y del PCE situado en el número 55 de la calle Atocha y ametrallaron a las nueve personas allí presentes. Fallecieron cuatro abogados y un sindicalista. Resultaron gravemente heridos otros cuatro letrados. Aquella semana fue especialmente trágica en el Estado español, hasta el punto que se la conoce como la «semana negra» de la Transición española.