Paneles informativos visibilizan a las seis mujeres del parque de las Pioneras de Iruñea

Paneles informativos visibilizan a las seis mujeres a las que el Ayuntamiento de Iruñea ha dedicado el parque de las Pioneras. El Consistorio ha realizado un acto de reconocimiento con representación municipal, familiares y allegados y grupos de mujeres.

El alcalde de Iruñea, Joseba Asirón y la concejala especial de Igualdad, Laura Berro, acompañados por representantes de la Corporación municipal, han visitado el parque de las Pioneras, un espacio público de encuentro situado en Lezkairu que enlaza la trasera del colegio Liceo Monjardín (calle Soto de Lezkairu) con el inicio de Mendillorri, en un trazado en paralelo a la carretera de Badostáin.

Ya están instaladas las tres placas que consagran el nombre del parque por decisión de Alcaldía en el mes de marzo. Desde hoy también están colocados en sitios preferentes los seis paneles que reflejan la historia de las mujeres concretas que dan nombre a sus distintas plazuelas.

En el acto han participado familiares y allegados de las muejeres homenajeadas así como representantes del grupo de trabajo Nombrar mujeres en Iruñea, del Consejo Municipal de la Mujer y de colectivos o asociaciones de mujeres.

Durante su desarrollo, la poeta Ventura Ruiz ha leido una poesía de Francisca Sarasate sonorizada por un integrante del cuarteto Zura, Daniel Sádaba. Una vez concluido el homenaje, se ha ofrecido una visita contextualizada al parque.

La decisión de Alcaldía sobre estos espacios responde a la decisión del Pleno del año 2013 que reclamaba más espacios ciudadanos dedicados a mujeres que reúnen méritos suficientes para consagrar de esta forma sus nombres y su memoria.

700 metros de historia de la lucha por la igualdad
El recorrido propuesto tiene 700 metros. Partiendo de la avenida Juan Pablo II en dirección a Fuente de la Teja se disponen varios espacios, todos ellos interconectados. El primero es un espacio circular con un gimnasio urbano dedicado a Julia Fernández Zabaleta (Iruñea, 1898-1961). Fernández Zabaleta fue un pilar de uno de los campos que históricamente más ha impulsado la lucha de las mujeres por la igualdad: la instrucción. En su caso, además, trabajó por la promoción del euskera.

La siguiente zona con dedicación nominativa es la plaza de la curandera Martija de Jauregi, un espacio que se identifica por los coloridas juegos infantiles que alberga. Martija de Jauregui (siglo XVI) fue procesada por la Santa Inquisición por sus conocimientos y trabajos en ginecología y medicina tradicional basada en hierbas curativas.

En el sentido del paseo el caminante se encuentra enseguida con la tercera plaza, que también está equipada con un conjunto de juegos infantiles. Es la plaza de la científica María Josefa Molero Mayo (1921-2011). Esta química, nacida en Izaba, obtuvo reconocimientos profesionales internacionales y nacionales por su trayectoria en un campo, la ciencia, en el que aún quedan muchos estereotipos por romper.

María de Lucea, irundarra del siglo XIV, da nombre a la siguiente plaza, un espacio con un banco corrido y cuatro árboles que con el tiempo le darán sombra a la zona de estancia. De Lucea fue costurera, bordadora y cordonera para la Casa Real en tiempos de Carlos III y Leonor de Trastámara.

Los dos espacios circulares más próximos al ascensor urbano de Lezkairu, por estar conectados entre sí, se han dedicado conjuntamente a una sola mujer del ámbito de la cultura: la orfeonista Rita Aguinaga Viliato (Tuy, Pontevedra 1912-1986) fue cantante solista en el Orfeón Pamplonés cuando esa institución se abrió a las mujeres en 1903 e impulsó las Emakume Abertzale Batza (Asociación de Mujeres Patrióticas). Las plazas acogen un gimnasio urbano y una zona de estancia con árboles y banco corrido.

El último espacio se sitúa al otro lado del gran círculo de instalaciones deportivas tras salvar la calle Valle de Egüés. Ya en las proximidades de la calle Fuente de la Teja este último espacio, el más grande y el único no circular. Es una plazuela dedicada a Francisca Sarasate Navascués (A Coruña, 1853-1922) hermana del reconocido músico y compositor iruindarra. Francisca contribuyo a visibilizar a las mujeres en la escritura, tanto desde la narrativa y la poesía, como desde el mundo de las publicaciones periódicas.