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Exconsejero Bengoa: «Hubo una trama sistemática para el beneficio de las empresas de Margüello»

El consejero de Sanidad durante el Gobierno de Patxi López, Rafael Bengoa, ha afirmado que en la administración sanitaria de Bizkaia y en los años anteriores a su legislatura, cuando gobernaba el PNV con Gabriel Inclán como consejero, «hubo una trama sistemática» para beneficiar a las empresas del exdirector de Calidad del Hospital de Cruces, José Carlos Margüello.

Rafael Bengoa, exconsejero de Sanidad, en los tribunales. (FOKU)

Rafael Bengoa, consejero de Sanidad en el Gobierno de Patxi López, ha comparecido este lunes como testigo de la Fiscalía en el juicio denominado ‘caso Margüello’, que arrancó la semana pasada en la Audiencia de Bizkaia y en el que están acusados, además del propio Margüello, la considerada testaferro de sus empresas, María Nieves Fernández, y otros dos exaltos cargos de Sanidad con Gabriel Inclán, en el cargo con Gobierno del PNV.

Bengoa ha afirmado que en la administración sanitaria de Bizkaia y en los años anteriores a su legislatura, cuando gobernaba el PNV con Inclán precisamente, «hubo una trama sistemática» para beneficiar a las empresas del exdirector de Calidad del Hospital de Cruces, José Carlos Margüello.

«Como patrón sistemático, se organizaron procesos de contratación sin seguir las normas para buscar vías paralelas y rápidas que beneficiaran a esas empresas; se prorrogaban los contratos y se subían de forma exagerada las tarifas que cobraban, hasta un 19% frente a una media del 3 o 4%».

También ha declarado Inclán, en este caso por parte de las defensas, que se ha referido en contrato a la adjudicación por vía de emergencia y sin concurso público a una de estas empresas, Gestión de Servicios Sanitarios siglo XXI.

Según ha dicho, conoció esta adjudicación a posteriori y, dada la situación «excepcional» de las listas de espera que había en aquel momento en Bizkaia, le pareció «lógica». A su vez, ha destacado que en su vida profesional no ha dado «ni un ápice de más, ni un ápice de menos a sus amigos, ni tampoco a los enemigos».