Kittel, la gran decepción de la primera semana en un Katusha dividido
Marcel Kittel ganó cinco de las primeras once etapas del último Tour, todas las llegadas que disputó, y esta edición apenas ha logrado un tercer puesto en la etapa inicial. El sábado su director Dimitri Konyshev decía en “L’Equipe” que «le pagamos mucho dinero y es un egoísta».
El Tour cerró ayer la primera semana, en la que se concentraban la mayoría de las opciones que iban a tener los sprinters, con un empate a dos victorias en las llegadas masivas entre Fernando Gaviria, Peter Sagan y Dylan Groenewegen y una decepción grande de Marcel Kittel, que solo ha logrado un tercer puesto, un quinto y un decimoquinto en las seis llegadas disputadas al sprint.
El alemán fue la gran apuesta del Katusha para esta temporada con el aval de sus catorce victorias en el Tour, cinco en la última edición, en la que fue el dominador de las llegadas masivas, sin que el Quick Step pudiera acercarse a esas cifras tras un año en el que estuvo en duda su continuidad.
El equipo ruso no está contento con el rendimiento del sprinter, que este año solo lleva dos victorias en la Tirreno Adriático cuando el año pasado sumó catorce. Su director Dimitri Konyshev explotó con unas declaraciones recogidas por “L’Equipe” el sábado en las que señalaba que «le pagamos mucho dinero, pero él es un egoísta y solo está interesado en sí mismo. En Cholet, antes de la contrarreloj por equipos, él estaba jugando con su teléfono durante la reunión del equipo, para decirme que no estaba interesado en lo que estaba diciendo».
Kittel no quiso hacer declaraciones sobre esa entrevista antes de la etapa y después arrojó la bicicleta tras ser decimoquinto en la etapa. Ha quedado al descubierto la tensión existente en un equipo que se ha dividido en dos en este Tour. Hay un grupo de corredores que están al servicio del líder para la general, Ilnur Zakarin, tras ser el año pasado tercero en la Vuelta y quinto en el Giro con Dimitri Konyshev como director de su confianza y otros corredores que trabajan para Kittel con el director deportivo alemán del equipo, Torsten Schmidt, y con Tony Martin, que ayer no pudo tomar la salida.
Kittel se ha quejado de que el equipo no le apoya lo suficiente y de que fue abandonado en la crono por equipos para no perjudicar las opciones de Zakarin, mientras que tras la polémica generada con sus declaraciones Konyshev defendió que el sprinter no se puede quejar del trabajo de su equipo a pesar de que deben dejar corredores al servicio de Zakarin. Sí vino a matizar las declaraciones recogidas en la entrevista al decir que «todos los corredores están con su teléfono a todas horas, todos los días. El problema es el teléfono. Normalmente los velocistas son un tanto egoístas, pero a Marcel Kittel le gusta ayudar al equipo y ha apoyado a Ilnur a estar en una buena posición. No podemos quejarnos de él. Tal vez no está al 100%, tal vez se ha perdido el tren que tenía el año pasado. En una gran carrera es más fácil si tienes un solo líder, pero el equipo funciona muy bien para él, no puede quejarse de esto. Es un velocista muy bueno, algo no funciona por el momento, pero sigo creyendo que puede ganar una etapa».
Cavendish tampoco responde
No es el único sprinter que no ha respondido por el momento. Mark Cavendish, dominador de las llegadas en 2016 y que suma 30 victorias en la prueba, este año no ha pasado del décimo puesto del sábado, que mejoró al octavo con la sanción a Greipel y Gaviria. Esta temporada solo ha ganado una etapa en el Tour de Dubai y a los 33 años da la sensación de que ha perdido la punta de velocidad y la valentía que le caracterizaba.
laporte no ha podido responder a la apuesta de cédric vasseur
Christophe Laporte es otro de los corredores que no ha respondido a la apuesta del nuevo manager del Cofidis, Cédric Vasseur, al confiar en él como jefe de filas y dejar fuera del Tour a Nacer Bouhanni con un conflicto interno que quedó en evidencia cuando los dos discutieron tras hacer primero y segundo en una etapa de la Route de Occitanie. Luego trascendió que el director ordenó que debía ganar Laporte, que empezó mejor el año con seis victorias, y que Bouhanni no lo acató para sumar su quinta en los dos últimos meses.
Vasseur decidió renovar a Laporte hasta 2021 y llevarlo al Tour. Dejó a Bouhanni, con contrato hasta 2019, para la Vuelta. Entendía que no debía llevar a dos velocistas y que Laporte además de esprintar, es más completo y podía entrar en alguna fuga y buscar victorias de otra forma. Hasta ahora solo ha conseguido dos quintos puestos.J.I.