Sky mantiene el liderato interno de Froome, el designado para ganar
Ni la segunda victoria consecutiva de Thomas ni la confirmación de que está más fuerte que Frooome ni su maillot amarillo con 1:39 al inglés y 1:50 a Tom Dumoulin hace cambiar el papel de líder del Sky. Era el designado por el equipo para ganar en Alpe d’Huez, pero no pudo lograrlo.
Thomas dejó claro con su trabajo en la subida a Alpe d’Huez y en sus declaraciones tras la etapa que el líder del Sky es Chris Froome: «Como dije, aún estoy corriendo para Froome, que sigue siendo el líder del equipo para la general. Él sabe cómo se debe competir tres semanas. Es el hombre elegido por el Sky. Probablemente sea el mejor de todos. No sé si podemos llegar a París en esta situación. Tal vez en los próximos días pueda mantener el maillot, pero esta carrera es muy dura. Son tres semanas y nunca sabes cómo puede reaccionar tu cuerpo».
Se le preguntó en la rueda de prensa posterior si sentía que había ganado el Tour en Alpe d’Huez y respondió que «no. Por el momento solo pienso en valorar esta victoria, que es increíble. Cuando he atravesado la meta pensaba que podía haber alguien adelante, me costaba creer que había pasado primero la línea. Pero, a pesar de lo que ha sucedido, Chris sigue siendo el líder. En tres semanas ofrece garantías. Yo en un día puedo perderlo todo. Espero poder disfrutar más el maillot a partir de ahora porque hoy la carrera ha sido muy dura para disfrutar, incluso con el maillot amarillo. Me sentía bien, pero no tanto como ayer. Tenía el objetivo de seguir a los corredores de la general y esta victoria la recordaré siempre».
Le plantearon que en las grandes vueltas ha fallado en la tercera semana –sus mejores puestos son dos decimoquintos en el Tour en 2015 y 2016, aunque en ambas ediciones trabajó para la victoria de Froome–: Contestó que «no sé cómo voy a responder. La gran diferencia con 2015 es que entonces hacía un gran trabajo para Froome y no pensaba en la general. Este año es diferente. Hasta ahora no he hecho grandes esfuerzos, pero mi capacidad para aguantar tres semanas es desconocida. Chris Froome, con sus seis victorias en grandes vueltas, nos permite confiar en que podrá tener esta continuidad hasta el final del Tour. Que yo esté en su lugar en la general lo único que hace es darnos una carta más para jugar».
Lo que cambia también es que Thomas ha preparado solo el Tour, mientras que Froome, como Dumoulin, ha disputado el Giro y también es una incógnita su rendimiento. Por ahora el galés ha demostrado estar mejor y hace recordar al Tour de 2012, cuando Froome era más fuerte que Wiggins, pero el equipo mantuvo su liderazgo y ganó el líder previsto con una mala relación entre ambos. En este caso parece que no habrá ese problema porque los dos son compañeros desde la época de Barloworld en 2009 y Froome tiene un mejor carácter que el de Wiggins.
Bernal desveló el plan del equipo
Pero lo que quedó claro es que Sky sigue firme en su línea de apostar por un líder independientemente de quién sea el más fuerte o lleve el maillot amarillo. El colombiano Egan Bernal desveló tras llegar a meta que «el plan era que Froome ganara la etapa. Él se sintió bien en los últimos días y antes de la etapa dijo que quería atacar, por eso hicimos un gran esfuerzo en la última subida. Estaba al límite cuando atacaron, pero necesitas controlarte. En la radio, el director me dijo que mantuviera el ritmo y que controlara porque Froome iba a atacar». Atacó tras prepararle el terreno Thomas como tantas veces ha hecho, pero ayer Dumoulin y Bardet no tuvieron problemas para seguirle y el galés lo aprovechó para ganar la etapa.
MALESTAR TRAS EL EMPUJÓN A FROOME Y LOS INSULTOS, PITOS Y ABUCHEOS
La buena jornada para el Sky se vio empañada por la preocupación que hay en el equipo con la hostilidad que encuentran sus corredores. Froome fue empujado en un hombro en la última subida por un aficionado que fue a agredirle. Él y Thomas tuvieron además que escuchar pitidos, insultos y abucheos en una triste ascensión en la que hubo bengalas y muchos aficionados que pusieron en peligro a los ciclistas y motivaron el choque de Nibali con una moto y su caída.
Tras estos incidentes, Thomas dijo que «no es agradable. Se puede aguantar si solo son silbidos, pero cuando hay gestos peligrosos es más complicado. Si la gente no quiere al Sky, eso no me supone ningún problema, pero es necesario al menos que la gente nos permita correr y no toquen a los corredores. Cada uno tiene el derecho de expresar su opinión, pero la carrera debe desarrollarse normalmente».J.I.