INFO

Rescate con riesgo de colapso de otra presa en Brasil

Las tareas de rescate tras el colapso de la presa de un complejo minero en Brasil llegaron a suspenderse durante unas horas por el riesgo de ruptura de otra presa minera, lo que provocó la evacuación de miles de personas. Cerca de 300 personas siguen desaparecidas.


La misión de rescate emprendida tras el colapso de una presa en la localidad brasileña de Brumadinho, en el Estado de Minas Gerais, se suspendió ayer por la amenaza de ruptura en una segunda presa de la localidad que llevó a la evacuación de 24.000 residentes. La presión de allegados de desaparecidos a las autoridades hizo que se aceleraran los trabajos de drenaje de la represa en riesgo y se reanudaran las labores de búsqueda.

Mientras, el número de fallecidos se mantenía en 40 y el número de desaparecidos se acerca a los 300. Los bomberos de Minas Gerais e integrantes de la Defensa Civil fueron casa por casa avisando a sus vecinos y cortaron varias carreteras que bajan hasta el valle donde ocurrió la tragedia el viernes, ante el temor a que pudiera repetirse un accidente.

El último balance elevaba a 166 el número de trabajadores de Vale, la operadora de la presa, que han desparecido y a 130 las personas ajenas a la minera que aún no han sido localizadas. En cuanto a los 176 evacuados con vida, 23 están hospitalizados. La zona río abajo quedó inundada de agua y lodo, que sepultó varias viviendas. La presa que sufrió la rotura era usada para la recirculación del agua en una planta de contención de residuos para sucesos de emergencia. Según la empresa Vale, podía contener hasta un millón de metros cúbicos de agua y residuos ferrosos.

El Gobierno de Minas Gerais ha impuesto una multa de 99 millones de reales brasileños (unos 23 millones de euros) a la empresa por los daños causados. Además, los tribunales han bloqueado un total de 11.000 millones de reales (unos 2.561 millones de euros) de las cuentas de Vale para asegurar posibles indemnizaciones, resarcir a las víctimas y garantizar recursos para reparar los daños.

La firma ya se vio implicada hace tres años en una catástrofe similar, ocurrida en una de las minas de su subsidiaria Samarco en el estado de Minas Gerais, en la que murieron diecinueve personas al romperse un dique.