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EH Bildu de Iruñea exige paralizar la apertura de Padre Moret al tráfico por sus efectos negativos

EH Bildu de Iruñea ha advertido de los efectos ambientales negativos y de las afecciones a las villavesas que tendrá la apertura de la calle Padre Moret al tráfico, y exige a UPN y sus socios paralizar esa medida. En una declaración que se debatirá en Urbanismo reclama los informes técnicos necesarios para avalar ese anuncio y que se explique en la Junta de Movilidad del Ayuntamiento.

Maya pretende que la calle Padre Moret de Iruñea vuelva a ser abierta al tráfico.

La formación abertzale destaca en una nota «el efecto embudo que se creará en la confluencia de Padre Moret con Yanguas y Miranda en el caso de que la primera calle sea reabierta al tráfico privado».

Esta es una de las razones de fondo que explican la declaración que llevará EH Bildu para su debate y aprobación mañana, miércoles día 25, en Comisión de Urbanismo exigiendo «la paralización de tal medida anunciada por el tripartito de derechas (UPN, PP y Ciudadanos) la semana pasada».

Además de ese ‘efecto cuello de botella’, ya descrito en los informes técnicos tanto de Policía Municipal, como del Servicio de Movilidad y de la Mancomunidad de Iruñerria que en su día avalaron el Plan de Amabilización, la apertura de esta vía al tráfico privado «implicará una reducción considerable de los tiempos de tránsito de las villavesas y, por tanto, en la frecuencia de las mismas».

Añade que «es inaudito que cuando se están batiendo récords de viajeros al centro en villavesas, que cuando todas las ciudades de nuestro entorno están haciendo esfuerzos por alcanzar un modelo de movilidad sostenible que Iruñea ya estaba en camino de conseguir, que cuando estamos viendo que los tribunales tumban las estrategias de reversión de la derecha en proyectos como Madrid Central, UPN y sus socios se empeñen, contra el interés general de la ciudadanía, en volver a inundar el centro de la ciudad de coches, con lo que ello supone, además, de polución y atascos».

La propuesta que se debatirá mañana en Comisión de Urbanismo exige, por un lado, la paralización de cualquier «actuación contraria a las previsiones establecidas en el Plan de Amabilización del primer Ensanche y convocar a la mayor brevedad posible la Junta de Movilidad para que se nos informe de la situación de este proyecto y de todas las iniciativas de movilidad ya en marcha o previstas en el anterior mandato».

Por otro lado, también se insta al equipo de gobierno a que «recabe los informes que correspondan a los servicios técnicos, específicamente el de los servicios del TUC de la Mancomunidad sobre las afecciones negativas que podría generar al servicio del transporte público la reapertura de la calle Padre Moret al tráfico rodado en general y lo dé a conocer a la Junta de Movilidad».

Desde la formación abertzale se recuerda que el anuncio lanzado la semana pasada «por el tripartito de derechas carece de informes que lo avalen, no ha sido ni expuesto ni debatido en el órgano que corresponde y supone una ocurrencia más de un equipo de gobierno sin iniciativa y cuya única prioridad es revertir lo hecho por el anterior gobierno para llevar de nuevo a Pamplona a una década atrás».

Desde EH Bildu se pone de relieve que en una declaración aprobada recientemente por mayoría en esa misma Comisión «decíamos que el inicio de este mandato con el alcalde Enrique Maya está siendo especialmente negativo en relación con las cuestiones referidas a la movilidad: anuncio de reversión grave en el proyecto de Pío XII, suspensión del inicio de las obras del Plan de Amabilización, eliminación del servicio de polibicis… Nuestra apuesta en el tema de la movilidad sostenible, como en otros que consideramos Líneas Estratégicas de Ciudad, pasa porque los proyectos a implantar sean respaldados por las más amplias mayorías dentro de la Corporación para evitar bandazos y utilización política de esta materia sensible. Así lo han hecho en otras ciudades mediante Pactos por la Movilidad y todas las fuerzas políticas lo han ido respetando».

«La decisión ya adoptada para la reapertura de la calle Padre Moret, nuevamente de forma unilateral y sin estudios previos, es una reiteración de malas prácticas en esta materia tan sensible. Podríamos decir, en estos tiempos de revueltas metereológicas, que llueve mucho ya sobre mojado. Esta decisión podría tener afecciones importantes al correcto funcionamiento del transporte público o a la calidad ambiental y urbana de ese espacio y es muy importante calibrarlas técnicamente antes de cualquier intervención de reversión», concluye la declaración.