Pensionistas seguirán concentrándose en Iruñea por una pensión mínima de 1.080 euros
Más de un centenar de personas han participado en la concentración que los lunes sigue reclamando una pensión mínima de 1.080 euros en la plaza Consistorial de Iruñea. Los pensionistas han anunciado que continuarán las movilizaciones en noviembre y diciembre, y que se plantea la convocatoria de una huelga general en enero.
La concentración ha comenzado a las 12.00 y se ha prolongado por media hora con los congregados situados detrás de una pancarta en la que se podía leer ‘Pensión mínima 1080 euros, gutxieneko pentsioa. Revisión IPC real. Pentsionistak aurrera’.
Durante ese tiempo, han coreado varias consignas, como «Pacto de Toledo, pikutara», «Brecha en el salario, brecha en la pensión» o «Gobierne quien gobierne, las pensiones se defienden». Incluso no han faltado algunas canciones con letras relacionadas con las pensiones.
En una intervención, se ha recordado que «desde los poderes políticos, económicos y mediáticos insisten en que el sistema público de pensiones no es viable, que las cotizaciones no dan para pagar las pensiones».
Frente a esa versión, han ofrecido algunos datos «que muestran cómo el actual sistema público dedica las cotizaciones a financiar prestaciones que debieran correr a cargo de los Presupuestos Generales». En ese grupo, han situado el coste de pensiones no contributivas (19.401 millones de euros), coste de las pensiones de orfandad (1.571 millones), coste de las pensiones a familias (291 millones), coste de las prestaciones de maternidad (2.558 millones), salarios de los funcionario (2.400 millones) y subvenciones de empleo a empresas (3.700 millones), lo que hace un total de 29.921 millones de euros.
Los pensionistas han señalado que si estos costes fueran asumidos por los Presupuestos, como consideran que debería ser, la pensión mínima «podría ser muy superior» a la actual.
Por ese motivo, han anunciado que seguirán adelante con las concentraciones de los lunes a lo largo de los meses de noviembre y diciembre, y que incluso se baraja la convocatoria de una huelga general en enero.