Antiviolencia contra bengalas, banderas de presos en Burgos y gritos contra las FSE en Eibar

La comisión Antiviolencia insta a los clubes a que no permitan el uso de bengalas en los estadios ni en los aledaños. Asimismo, ha propuesto sancionar a un seguidor del Burgos por mostrar una banderola por los presos vascos y un seguidor del Eibar por gritos contra las FSE.

En los últimos partidos del Athletic y Real en Copa, y también en el del Atlético de Madrid en Champions, se han visto recibimientos multitudinarios con bengalas a los autobuses de los equipos. Sin embargo, la comisión Antiviolencia insta a todos los clubes y a aficionados en su última resolución a no utilizar bengalas ni material pirotécnico porque es «peligroso cuando se utilizan en espacios con gran acumulación de personas».

Asimismo, en su propuesta de sanciones destaca que plantea multar con 2.500 euros a un aficionado del Burgos por exhibir «una bandera a favor de los presos políticos vascos que provocó una alteración de la seguridad ciudadana y varias quejas en el interior del recinto deportivo por parte de numerosos aficionados allí presentes». El seguidor del Burgos fue expulsado del recinto deportivo. Esta resolución choca con las decisiones de tribunales que han avalado que no es ilegal mostrar banderolas por los presos.

Real, Osasuna y Eibar

En las propuestas de sanciones de Antiviolencia también aparecen Real, Osasuna y Eibar. Al conjunto txuri-urdin le reclama 30.000 euros por proporcionar y facilitar a personas o grupos de seguidores que hayan incurrido en las conductas radicales y violentas y contrarias a lo establecido en la Ley del Deporte o que tengan en vigor sanciones con prohibición de entrada a los recintos deportivos.

Para Osasuna propone dos sanciones que ascienden a un total de 50.000 euros por deficiencias en el control de acceso en los partidos ante Alavés y Valencia en El Sadar.

Por último, aboga por una multa de 2.500 euros prohibición de acceso a los recintos deportivos por un período de cinco meses a un aficionado identificado del Eibar por «proferir graves insultos contra el árbitro del encuentro y contra los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado» desde la megafonía en el partido contra el Getafe en Ipurua.