El Pentágono ha armado a la policía de EEUU para ir a la guerra
El Ejército estadounidense lleva años suministrando armamento de guerra a la policía, desde fusiles de asalto hasta helicópteros, pasando por blindados. El programa, que Barack Obama limitó al final de su segundo mandato, fue reimpulsado por Donald Trump. El Partido Demócrata ha rescatado una iniciativa legislativa que fracasó en el intento de desmilitarizar a la policía tras la represión de las protestas antirracistas en Ferguson en 2014.
El Pentágono está acusado de haber militarizado en los últimos años a la policía estadounidense al suministrarle gratis blindados y armas de guerra, un programa que los demócratas quieren limitar.
Las imágenes de policías en actitud de combate y armados con fusiles de asalto ante los manifestantes han relanzado el debate sobre un programa que Barack Obama limitó en 2015 pero que Donald Trump relanzó en 2017.
Desde 1997. El Ejército repartió entre más de 8.000 servicios policiales equipamientos de ocasión o nuevos que van desde helicópteros a blindados para resistir ataques con bomba, todo ello con un valor de 6.800 millones de dólares.
Solo en 2017 repartieron 500 millones de equipamientos.
Equipamientos absolutamente exagerados. En Montana, la policía del condado de Flathead (90.000 vecinos), recibió un blindado antiminas.
La Policía de Ada (16.000 vecinos), en Oklahoma, recibió 34 fusiles de asalto M-16 y un blindado similar para sus ocho policías a tiempo completo y dos a tiempo parcial.
En un país donde la población tiene armas y sacudido por periódicos tiroteos, las escuelas han sido «premiadas» por la generosidad del Pentágono. 47 centros de Panama City, en Florida, recibieron 27 fusiles M-16 y dos blindados antiminas.
Iniciativa legislativa
El proyecto de ley de los electos demócratas de la Cámara de Representantes prevé limitar estrictamente la transferencia de explosivos, granadas y lanzagranadas, así como blindados más adaptados a escenarios de guerra que a labores policiales.
Asimismo, los senadores preparan un texto de ley, preparado por el electo demócrata por Hawai, Brian Schatz, que denuncia el sobre-armamento de la Policía estadounidense en los últimos años.
«Está claro que muchos servicios de policía se equipan como si fueran a la guerra, y eso no sirve para mantener el orden», ha declarado el senador al diario ´The New York Times? «El hecho de que el Ministerio de Defensa tenga armas de sobra no implica que deban de ser forzosamente usadas».
El senador Schatz y su colega republicano Rand Paul intentaron presentar un proyecto de ley similar en 2014 tras la las primeras informaciones sobre el programa 1033 en plena crisis por las protestas antirracistas en Ferguson.
La muerte de un joven negro de 18 años, Michael Brown, a balazos por un policía blanco, provocó 10 días de protestas en la pequeña localidad de Missouri entre la comunidad negra y la policía, que hizo uso de fusiles de asalto y blindados suministrados por el Pentágono.