Las residencias de la CAV permitirán la visita de dos personas por cada residente
Los residentes no podrán salir, por ahora, de los centros exceptuando sus zonas verdes o áreas comunes, según el acuerdo alcanzado entre Salud y las diputaciones para volver a la política de visitas previas al 18 de julio.
Las residencias de personas mayores de la CAV podrán retomar su política de visitas a sus residentes «de hasta dos personas», si bien se mantendrán las restricciones a las salidas de sus usuarios, según ha confirmado este jueves la consejera de Salud, Nekane Murga.
En una rueda de prensa en Gasteiz, donde se ha reunido previamente la Comisión de seguimiento de la situación epidemiológica en la CAV, Murga ha explicado que su Departamento y las tres diputaciones forales mantuvieron este pasado miércoles un encuentro para analizar las medidas preventivas adoptadas el pasado 18 de julio para prevenir transmisiones de covid-19 en este ámbito.
Asimismo, en la reunión se acordó también mantener en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa las restricciones en las salidas de los residentes, que no podrán desplazarse fuera del centro sociosanitario para cuestiones no esenciales.
«Consideramos que las personas que residen en centros sociosanitarios deben, por el momento, seguir sin salir a la calle, aunque sí salir a jardines y áreas comunes externas dentro de los centros», ha precisado la consejera de Salud.
Por el contrario, ha explicado que se ha acordado que «sí se debe reconsiderar la decisión de no recibir visitas ya que en muchos casos son absolutamente necesarias».
Por ello, se ha establecido que «a política de visitas debe ir volviendo a la situación previa al 18 de julio, valorando cada uno de los centros la situación epidemiológica de su área».
«Es decir, las personas residentes podrán recibir la visita de hasta dos personas, familiares o amigos», ha insistido Murga, que ha apelado a que, «ante la presencia de síntomas, si han estado en contacto o próximos a algún caso positivo, un foco o un contacto de una persona infectada, se debe evitar acudir a estos centros, incluso a realizar las visitas a sus familiares».
Según ha indicado la consejera de Salud, permitir las visitas supone «asumir un riesgo, pero el beneficio que aporta a estas personas es mayor».