Una delegación de electos vascos defiende en París el modelo inmersivo en euskara
Los centros educativos de Zuberoa, Nafarroa Beherea y Lapurdi han abierto este lunes sus puertas para los profesores aunque el arranque de curso, con presencia de alumnado, se producirá el martes. De manera previa, electos vascos acuden hoy al Ministerio de Educación, en París, para reclamar que no obstaculice el modelo inmersivo en euskara.
Junto a la crisis del covid-19, que obligará a realizar una vuelta a clase bajo estricta vigilancia sanitaria, hay otra cuestión que perturba el arranque de curso en el norte de Euskal Herria.
Efectivamente, la decisión del Rectorado de Burdeos de echar por tierra el proyecto de apertura de una clase de preescolar íntegramente en euskara en el centro público Basté-Quieta de Hiriburu, conocida antes de las vacaciones escolares, ha dado lugar a un amplio y plural movimiento de solidaridad que ha llevado a una delegación de electos vascos a desplazarse hoy mismo hasta París.
La delegación, encabezada por el alcalde abertzale de Hiriburu, Alain Iriart, ha estado integrada además por los parlamentarios Vincent Bru, Max Brisson y Frédérique Espagnac, según se puede ver en la fotografía que ha colgado en redes la senadora socialista.
Ce jour réunion avec @max_brisson et @bru_vincent et Alain Iriart au Ministère de l’@Educ ation_gouv pour l’ouverture de la classe immersive de #StPierreDIrube #Basque #LanguesRegionales et les modalités de l’enseignement immersif àl’école publique pic.twitter.com/Orq1p1yUd0
— Frédérique Espagnac (@FEspagnac) August 31, 2020
Con su decisión de rechazar un proyecto experimental de inmersión en lengua vasca que cuenta con el apoyo de todos los actores concernidos –profesorado, padres y Ayuntamiento de Hiriburu–, el Rectorado ha abierto camino a una prohibición más general que podría llevar a impedir la apertura de nuevas líneas «100% en euskara».
Las palabras del inspector de Educación para la circunscripción de Hiriburu, en la línea de afirmar que no hay que ver la decisión adoptada en Hiriburu como «un ataque al euskara», no ha calmado los ánimos.
«Queremos que se escuche nuestro mensaje, y que se den garantías al modelo inmersivo de que no se va a dar marcha atrás sobre lo conseguido hasta la fecha», ha destacado antes de la reunión en París el diputado Bru, miembro de la mayoría presidencial.
Una petición en favor del modelo inmersivo, difundida por una plataforma digital, ha recabado ya más de 5.000 firmas y mañana, coincidiendo con el arranque oficial del curso, tendrá lugar una movilización ante la escuela de Basté-Quieta, en Hiriburu, a la que han dado su apoyo las asociaciones Ikas Bi, Biga Bai, Euskal Haziak, Euskara Geroan, Erakasleak y Seaska.
Kontseilua y Euskal Konfederazioa, al igual que Euskal Herria Bai, han dado hoy su apoyo a la movilización de Hiriburu, que se desarrollará este martes a partir de las 10.00.