Saski Baskonia vuelve a ganar situado al rebufo de un estelar Achille Polonara (87-68)

Los gasteiztarras han dominado el partido excepto en el tercer cuarto, pero cuando más se ha arrimado Baxi Manresa, los de Ivanovic han replicado con un parcial de 10-2, con un Polonara erigido en líder y guia espiritual.

TD SYSTEMS BASKONIA 87 - BAXI MANRESA 68

Ganar siempre sienta bien, aunque no todas son iguales. Achile Polonara llegó la pasada campaña casi de rebote y bajo la sombra de Shengelia, pocos le prestaron atención. En la «burbuja» de Valencia empezó a destaparse el ala-pívot italiano y con la nueva campaña es uno de los guias espirituales del cuadro que dirige Dusko Ivanovic. Sin duda, así ha sido en su caso, ya que ha sumado 17 puntos, 13 rebotes, 4 asistencias, 3 recuperaciones y 31 de aloración. Otros jugadores como Vildoza, Peters o Dragic también han brillado, así como ha causado preocupación que Pierria Henry haya salido con dolor en el tobillo izquierdo, pero ha sido Polonara quien ha dinamitado el duelo.

Por una vez, los hombres de Dusko Ivanovic han saltado a la cancha mucho más concentrados, cargando con fuerza el rebote y sin hacer concesiones en el rebote a un Manresa que siempre hace daño al rebote a pesar de su escasa talla. Así las cosas, solo Eatherton ha sido capaz de replicar a los gasteiztarras, que con la entrada de Youssoupha Fall han redoblado ese dominio, exacerbado por la falta de acierto catalán.

Cuando el acierto del rival desde la larga distancia no se da, la defensa gasteiztarra puede desplegarse más a gusto y ser más agresiva, y si el rebote también pertenece a los de Ivanovic, estos pueden salir en transición y llegar jugando, algo que Luca Vildoza ha aprovechado para dejar bonitas perlas de su talento.

Sea como fuere, después del 21-16 con el que ha terminado el primer cuarto, el verdadero tirón gasteiztarra ha llegado después. Primero, fruto del contagio de los errores en el tiro exterior del Baskonia, el Manresa se ha arrimado hasta un peligroso 27-25, sobre todo después de la entrada de Vaulet y los minutos de descanso de Fall.

No obstante, el tiempo muerto de Dusko Ivanovic ha resultado providencial. Sus pupilos han saltado mucho más atentos a las líneas de pase y han encontrado el acierto fruto del buen movimiento de balón, con buenos minutos de Jekiri, por lo que el Baskonia ha endosado un parcial de 11-0 a los de Pedro Martínez, que a duras penas han reaccionado para alcanzar el descanso con un marcador de 41-30, la ventaja más grande que Saski Baskonia ha conseguido a la media parte en lo que lleva de campaña.

Susto antes de romper el duelo

Esta vez la bronca ha debido ser de Pedro Martínez, porque sus muchachos, en especial Mason, ha salido a toque de corneta. Pese a no recuperar el acierto y pese a tener la réplica de Zoran Dragic y Polonara en cada momento, el cuadro gasteiztarra se ha visto asediado por un conjunto del Bages convencido en sus opciones. Ni siquiera la opción de poner a Fall ha salido bien, ya que el sorprendente Yankuba Sima le ha sabido parar los pies y le ha cargado de personales.

No se ha colocado por encima el cuadro catalán, pero se ha convertido en un equipo garrapatero, que ni con arreones se ha quitado el Baskonian de encima. Así, un triple de Eurlis Báez ha dejado el resultado al final del tercer cuarto en un incómodo 61-56.

Dos tiros libres de Jonathan Tabu ha puesto el 61-58, y por un momento quizá hasta Dusko Ivanovic haya tragado saliva. No obstante, sendos triples de Polonara y Peters, más cuatro puntos seguidos de Jekiri han supuesto un parcial de 10-2 que ha disparado de forma decisiva a los gasteiztarras, un parcial alimentado además por una defensa muy agresiva ante un rival que, sin acierto desde lejos, ha tenido que jugársela tirándose sobre la defensa baskonista.

A partir de ahí, el Baskonia ha jugado a placer. La renta se ha disparado hasta la veintena, y solo las molestias en el tobillo de Pierria Henry han empañado mínimamente la convincente victoria gasteiztarra, a la estela de un Polonara que ha regalado canastas, asistencias y robos de pura fantasía.

El partido del viernes, sin público

Por otra parte, el pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), presidido por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y en el que participan los consejeros del ramo de todas las comunidades autónomas, ha aprobado un nuevo acuerdo para prohibir en todo el Estado español la asistencia de público en las competiciones internacionales de fútbol y baloncesto de carácter profesional, a cuenta de la covid-19.

Ello implica que el partido de Euroliga entre Saski Baskonia y el Barça, que tendrá lugar el viernes a partir de las 20.30 en el Buesa Arena, se va a tener que disputar sin aficionados en las gradas.

TD Systems Baskonia: Vildoza (13), Giedraitis (4), Polonara (17), Jekiri (12) y Kurucs –quinteto inicial–, Dragic (14), Pierria Henry (6), Sedekerskis (2), Fall (6) y Peters (13) y Diop.

Baxi Manresa: Dani Pérez (), Eatherton (15), Rafa Martínez (2), Eulis Báez (6) y Guillem Jou (4) –quinteto inicial–, Hinrichs (), Tabu (5), Mason (13), Vaulet (11), Sajus (6) y Sima (6).

Parciales: 21-16, 20-14, 20-26, 26-12.

Bilbao Basket, a por su segunda victoria

A partir de las 21.15 de este jueves, RETAbet Bilbao Basket retoma su actividad liguera después de ceder frente al Pinar Karsiyaka el martes. El Bilbao Arena acogerá sin espectadores un partido que se adivina difícil frente al Morabanc Andorra, un conjunto que está sabiendo capear las ausencias que tiene por lesión, sobre todo en el juego interior para asentarse en la zona media de la tabla, con un balance de 3-4.

No obstante, los hombres de negro no pueden fiarse de las ausencias de jugadores como Moussa Diagné. En la plantilla que maneja Ibon Navarro hay fìsico de sobra, especialmente desde el retorno de Tyson Pérez, un ala-pívot hispano-dominicano que ha dado un gran paso adelante en la presente campaña.

Asimismo, el dúo de tiradores que componen Senglin y el ex de Bilbao Basket Clevin Hannah supone un peligro de cuidado para los de Mumbrú, que debieron sacar muchas lecciones de su derrota frente a Pinar Karsiyaka.

Los vizcainos llevaron el peso en el marcador durante más de 20 mnutos, pero el paso adelante físico del cuadro otomano no lo pudieron responder. Pues algo así se encontrarán en la noche del jueves, ya que Andorra pasa por tener una plantilla atlética a la que solo el falta un poco de acople. Con un balance de 1-4 –a la espera de recuperar el 4 de noviembre el partido ante el Real Madrid–, los bilbainos no pueden dejar pasar otra oportunidad de sumar su segundo triunfo y comenzar a avanzar posiciones.

«Hicimos tres primeros cuartos buenos, pero en el último el Pinar Karsiyaka subió el nivel de dureza y no pudimos igualarlo. Nos queda aprender de ello y subir esa intensidad y concentración durante los cuarenta minutos», ha admitido el alero Alex Reyes en declaraciones concedidas a su club.

Con todo, el jugador vallisoletano se ha mostrado optimista al declarar que «seguro que si hacemos las cosas como en los últimos partidos tendremos muchas opciones».