El Athletic se impone al Granada con otro zapatazo de Berenguer en el descuento (2-1)
Villalibre ha abierto el marcado en el minuto 2 y Jorge Molina ha empatado en el tramo final. Cuando parecía que el partido iba a acabar con un empate decepcionante, Berenguer ha anotado el tanto de la victoria.
Victoria in extremis del Athletic ante el Granada en San Mamés con un gol en el descuento de Berenguer. El navarro ha vuelto a ser protagonista, con su octavo tanto de la temporada, soltando un zapatazo tremendo que se ha colado en la portería de Rui Silva.
El triunfo coloca al conjunto rojiblanco en la parte de arriba de la clasificación empatado en el octavo puesto con Celta y Granada. Sin embargo, el Athletic tiene un partido menos que jugará este miércoles ante el Atlético en Madrid.
Importante victoria del Athletic tanto por las formas, con un gol en el descuento cuando parecía que llegaba otro empate a uno, y sobre todo por los protagonistas. Un equipo con jugadores poco habituales ha sido capaz de adelantarse en el marcador liderado por Villalibre y Sancet en ataque. Hasta han podido sentenciar con el penalti fallado por Raúl García, pero el ganar superando adversidades le da un valor mayor a los puntos. Un enrachado Berenguer ha vuelto a ser decisivo con su octavo gol de la temporada. El navarro está que se sale.
Tal y como había anunciado en la previa, Marcelino ha introducido nueve cambios en el once. Tan solo Unai Simón y Unai Núñez han repetido. Las mayores sorpresas han sido la titularidad de Ibai Gómez en banda derecha y la ubicación en el centro de la zaga de Balenziaga. El de Zumarraga ha ejercido también de capitán. Con Capa y Lekue en los laterales, Vencedor y Dani García en el centro del campo, Morcillo ha salido en banda izquierda con Sancet y Villalibre en punta.
La apuesta del técnico asturiano ha funcionado de inicio y una buena combinación entre Morcillo y Sancet ha terminado en los pies de Villalibre, que con un gran movimiento de espaldas se escapaba de Germán y abría el marcador con un tiro cruzado. Un golazo de ariete puro con el que demostraba que, además de alegrar las victorias con la trompeta, es un futbolista que puede aportar al equipo.
El Granada no se ha amilanado y ha rozado el empate en la primera aproximación. Foulquier se ha colado por la derecha aprovechando la indecisión de la zaga bilbaina, que ha reaccionado para desviar el remate a córner. El equipo rojiblanco ha arrancado con algunas dudas en la retaguardia. Balenziaga y Lekue tuvieron algunas dificultades para acoplarse en sus posiciones, pero por fortuna los desajustes no han sido definitivos.
En el plano ofensivo el ímpetu de Villalibre y el desparpajo de Sancet generaban sensación de peligro en cada acción. El de Gernika ha completado un primer tiempo sensacional y el joven navarro ha acertado a moverse entre líneas. Morcillo y Lekue también se sumaban con sus incorporaciones desde la izquierda y el Athletic disfrutaba.
Sin embargo, otro fallo innecesario casi acaba en disgusto. Un saque de Unai Simón ha sido interceptado por el Granada y la jugada ha acabado con un remate flojo de Molina a las manos del portero. El conjunto visitante merodeaba la portería rojiblanca, pero al contrario que en otras ocasiones, el rival no ha estado nada certero.
Ambos entrenadores han movido el banquillo en el segundo tiempo cambiando a jugadores defensivos. Así entraba Yeray por Núñez y Víctor Díaz en el lateral derecho del Granada. Salvo a balón parado, el Athletic no sufría demasiado y Diego Martínez reforzaba el ataque metiendo a Soldado y Kenedy.
El equipo rojiblanco no ha tenido reparo en dar un paso atrás y esperar bien colocado en su campo a la espera de enganchar alguna contra. Marcelino también ha refrescado el equipo con Raúl García y De Marcos. En su primera intervención el navarro ha puesto un balón en profundidad a Villalibre y en la siguiente dispuso de un penalti que ha parado Rui Silva.
Y como suele ocurrir en estos casos, el Granada se encontraba con el empate en una acción aislada muy mal defendida por la zaga rojiblanca. Pese a las revisiones del VAR, el tanto de Jorge Molina subía al marcador y dejaba una sensación de decepción mayúscula. Otra vez un empate a uno.
Sin embargo, en el descuento Berenguer soltaba un zapatazo tremendo para otorgar una merecida, necesitada y buscada victoria en San Mamés.
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