«El problema está en que el mercado aún no se ha regularizado adecuadamente»

Con las costeras del verdel y de la anchoa está ya en marcha la campaña de pesca, que el año pasado se vio frenada por la pandemia. Ahora, la faena comienza con optimismo, pero todavía hay cierto recelo ante la respuesta del mercado al Brexit y a los problemas derivados del covid-19.

El pasado año no fue bueno para los arrantzales. La pandemia les cogió en plena campaña y arrancaron la faena con retraso. Ahora, con los problemas generados por la covid aún sin resolver, el Brexit suma dificultades. Miren Garmendia, secretaria general de la Federación de Cofradías de Pescadores de Gipuzkoa, valora el comienzo de la costera de este año.

El pasado día 2 se descargaron las primeras capturas de anchoa en Getaria. ¿Cuáles son las primeras sensaciones?
Con respecto a las capturas, las sensaciones no son malas. La anchoa está ahí y está en una buena situación. El problema está más en el ámbito comercial, en el mercado y en los precios. El mercado no se ha regularizado adecuadamente y todavía estamos sufriendo las consecuencias de la crisis generada por la pandemia del covid-19. Estamos trabajando para que los precios sean sostenibles y rentables para el pescador.

La campaña del verdel ya lleva casi un mes en marcha. ¿Cómo se está desarrollando?
Pues el verdel se está resistiendo un poco. En las primeras semanas de la campaña no ha habido grandes cantidades. Es una especie que suele aparecer de golpe y en grandes cantidades, y todavía no se ha dado eso. Aún no es tarde y mantenemos la esperanza de que empiece a acercarse a nuestras aguas.

El pasado año la campaña de la anchoa arrancó con un mes de retraso debido a la pandemia y los bajos precios lastraron la actividad. ¿Cómo afrontan la costera este año?
De momento estamos en una tesitura bastante parecida a la de 2020. El problema del mercado que he comentado antes está ahí, no estamos en situaciones normales y eso se nota. Los consumidores habituales han visto frenada su capacidad de compra y hay cierta incertidumbre todavía.

¿Cuál es la situación general del sector? ¿Han recibido ayudas por la pandemia?
El año pasado el Gobierno Vasco sí que dio un apoyo a aquellas empresas que tuvieron grandes pérdidas con respecto a años anteriores. Desde Madrid también dijeron que iban a dar ayudas ante la imposibilidad de salir a pescar, pero todavía se están gestionando todos esos expedientes.
De momento esas ayudas las han cobrado muy pocos pescadores, esperemos que lleguen pronto, pero hay un colapso en la administración de pesca de Madrid. Me consta que se está trabajando en ello, y entiendo que se trata de toda la flota española y que es un trabajo muy grande. Pero, de momento, no está siendo muy ágil para un momento de crisis como este.

¿Cuál es el impacto de la pandemia en su día a día? ¿Qué medidas adoptan en el barco?
El año pasado trabajamos duro para establecer unos protocolos y de momento se están manteniendo: el uso de mascarilla, evitar la concentración de personas durante mucho tiempo... Ahora estamos a la expectativa de la vacunación, como otros sectores. Estamos recabando la información de los marineros que desean ser vacunados y los que no, y la gran mayoría está esperando la vacuna. Realizamos gestiones para que llegue cuanto antes; la esperamos con esperanza.

Durante las negociaciones del Brexit la pesca ha sido uno de las cuestiones más espinosas. ¿Cómo les afecta?
Tenemos dos especies principales que compartimos con los ingleses y cuyas negociaciones han afectado bastante, la del chicharro y el verdel. El chicharro todavía tiene una cuota provisional, en la que solo se ha asignado, de momento, para este primer trimestre.
En el caso del verdel, gran parte de la cuota ya se ha asignado, nos faltaría un pico pequeño. Pero si que ha sido un tema que ha generado incertidumbre. Vamos a ver como se desarrolla.
Nuestros pescadores no trabajan principalmente en caladeros del Reino Unido, pero indirectamente todo está interrelacionado, así que estamos a la espera de que se cierren definitivamente esas cuotas

La cuota del verdel ha sido reducida. ¿Qué les supone?
En un principio se redujo a un 65% del año pasado, pero finalmente se rectificó, y se ha asignado el 72%. Tampoco se ha descontado la multa que España está pagando por sobrepasar la cuota en 2009 y 2010. Afortunadamente hemos conseguido que lo de la sanción no se aplique ahora, sino en la cuota que falta por asignar.

¿Cuál cree que será la respuesta del mercado?
Esperamos que el mercado empiece a responder, somos optimistas. Creo que con el proceso de vacunación se empezará a normalizar un poco toda la actividad y eso imagino que se notará en el mercado. Pero de momento creo que vamos a tener que seguir sufriendo un poco las consecuencias del covid-19. Nuestro sector está interrelacionado con el nivel de normalidad de la actividad general.



«Todavía vamos a tener que seguir sufriendo las consecuencias del covid-19, porque nuestro sector está interrelacionado con el nivel de normalidad de la actividad general».