Una vertiginosa Eslovaquia sorprende a la parsimoniosa Polonia (1-2)

Con sus rápidas contras y la estrategia, Eslovaquia ha sorprendido a una Polonia muy lenta durante el primer tiempo y que se ha visto perjudicada por la expulsión de Krychowiak tras el descanso, justamente cuando ha mejorado en su juego y ha empatado.

No entraba dentro de las quinielas que Eslovaquia ganase a Polonia, pero los de Stefan Tarkovic han sido disciplinados en su juego y muy verticales en sus salidas, lo que les ha permitido primero adelantarse en el marcador y después aprovecharse de la inferioridad numérica polaca.

Desde los primeros compases, los papeles han quedado repartidos a la perfección. Los pupilos de Paulo Sousa han priorizado hacerse con el cuero, gracias a un pelotero como Zielinski, mientras que Eslovaquia ha optado por mantenerse bien colocado y penalizar las pérdidas del adversario.

El plan les ha salido mejor a los segundos, quienes después de avisar con un chut raso de Duda, han acabado golpeando pasado el cuarto de hora gracias a una jugada individual de Mak, que se ha marchado de sus dos marcadores –caño incluido– para rematar con poco ángulo al poste y contar con la fortuna de que el balón ha rebotado en la mano de Szczesny y se ha colado en las redes.

Con el 0-1, Polonia ha jugado al quiero y no puedo durante el resto del primer periodo. Ha insistido en su dominio, pero no le ha quedado más remedio que probar con disparos lejanos –Krychowiak, Zielinski y Linetty– ante la imposibilidad de entrar en el área eslovaca.

Por contra, los halcones han estado mucho más cerca del 0-2, por mediación de una doble ocasión de Kucka, sobre todo con un duro chut que se ha marchado por muy poco por encima del travesaño y un posterior remate forzado de cabeza.

En el descanso ha habido charla en el vestuario polaco, porque las águilas blancas han salido a morder. Tanto que, transcurridos solo 29 segundos de la reanudación, han logrado el empate con una gran jugada combinativa que ha culminado Linetty.

El envite ha entrado en una fase totalmente diferente, con total asedio de Polonia, espoleada por el 1-1, que ha puesto cerco a la meta de Dubravka. Hasta en tres lances ha podido obrar la remontada –tiro desviado de Zielinski, flojo disparo de Linetty y testarazo arriba de Glik–, pero ese empuje se ha derrumbado con la expulsión de Krychowiak.

Absurda segunda amarilla del exsevillista

El ex del Sevilla, un futbolista curtido en mil batallas y al que se le supone debe ser uno de los que más experiencia y poso debe aportar al cuadro polaco, no ha sabido frenarse en una entrada, máxime teniendo en cuenta que ya había visto la primera amarilla en el minuto 22.

Con media hora por delante, a Eslovaquia se le han abierto todo un mundo de posibilidades. Ha pasado de ser dominada a llevar la iniciativa, algo a lo que rara vez puede optar, y siete minutos después de estar con uno más sobre el campo, ha acertado con una jugada a balón parado.

Su jugador con mayor proyección, Milan Skriniar, central titular del campeón de la Serie A, el Inter, ha recogido un rechazo a la salida del corner, y sin dejar caer la pelota, ha enganchado un empalme con la suficiente fuerza y dirección como para que el guardameta polaco de la Juventus no pudiese llegar en su estirada.

Con más de veinte minutos por delante, a Sousa solo le ha quedado la alternativa de acumular futbolistas en la parcela atacante, a la vista de la nula participación de un casi inédito Lewandowski, lo que ha estado a punto de dar sus frutos en los últimos minutos.

Un saque de esquina que se ha paseado por delante de hasta cuatro jugadores polacos en el minuto 88, un remate con la zurda rozando el palo del central Bednarek en el 91 y un chut centrado de Swiderski en el 94 bien han podido darle un disgusto a una Eslovaquia que ha celebrado por todo lo alto su victoria y que no ha echado en falta las importantes bajas de Milic y Piatek.

FICHA DEL PARTIDO:

Polonia: Szczesny, Bereszynski, Glik, Bednarek, Rybus (Puchacz, m.74), Krychowiak, Linetty (Frankowski, m.74), Klich (Moder, m.85), Jozwiak, Zielinski (Swiderski, m.85) y Lewandowski.

Eslovaquia: Dubravka, Pekarik (Koscelnik, m.79), Satka, Skriniar, Hubocan, Kucka, Hromada (Hrosovsky, m.79), Haraslín (Duris, m.87), Mak (Suslov, m.87), Hamsik y Duda (Gregus, m.91).

Árbitro: Ovidiu Hategan. Expulsó a Krychowiak por doble amarilla (m.22 y 62), Hubocan (m.19).

Goles: 0-1, m.18: Szczesny (pp). 1-1, m.46: Linetty.1-2, m.69: Skriniar.