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Al menos cinco muertos tras una nueva explosión en las inmediaciones del aeropuerto de Kabul

Un ataque con cohetes en las inmediaciones del aeropuerto de Kabul ha provocado al menos cinco muertos en la capital afgana. Los talibanes y medios estadounidenses han apuntado que se trata de un ataque de Estados Unidos contra supuestos miembros del Estado Islámico.

Esta imagen de satélite muestra una de las zonas de acceso por carretera al Aeropuerto Internacional Hamid Karzai den Kabul el 19 de agosto de 2021. (Maxar Technologies-AFP)

Tres días después del último atentado en Kabul, una nueva explosión ha sacudido la capital afgana este domingo, provocando la muerte de al menos cinco personas, tres de ellas niños. El ataque ha tenido lugar en las inmediaciones del aeropuerto, mientras los países occidentales llevan a cabo sus operaciones de evacuación.

La explosión fue causada por «un cohete que golpeó una casa ubicada en el distrito 15 de la capital», ha dicho Qari Rashed, un oficial de la Policía de Kabul. Hasta el momento «cinco civiles, incluidos tres niños, murieron en el incidente», ha informado a Efe en condición de anonimato un médico del hospital de Khairkhana de Kabul, a donde han sido trasladadas las víctimas.

Las imágenes recogidas por la cadena afgana 1TVNews muestran una columna de humo que emerge del edificio, localizado en el barrio de Jwaja Bughra, en el distrito 11 de la capital.

 

Fuentes de los talibanes han asegurado que la explosión de este domingo ha sido dirigida por Estados Unidos. «Cerca del aeropuerto de Kabul, un presunto automóvil fue objetivo de una operación de las fuerzas estadounidenses y como resultado el conductor murió», ha dicho a Efe el portavoz talibán Bilal Karimi.

Medios como The New York Times y las cadenas ABC y Fox, que citan a funcionarios estadounidenses, han informado de un ataque de Estados Unidos contra supuestos miembros del Estado Islámico. De confirmarse, el nuevo ataque estadounidense llegaría solo un día después de que un dron acabara con la vida de dos supuestos miembros del Estado Islámico «de alto perfil» e hiriera a otro en la provincia de Nangarhar, este de Afganistán.

Después del atentado del pasado jueves, reivindicado por el Estado Islámico y que causó la muerte de más de un centenar de personas, el presidente estadounidense, Joe Biden, advirtió que un nuevo ataque inminente era «muy probable». Está previsto que las tropas estadounidenses abandonen el país el próximo 31 de agosto.

Desde que los talibanes recuperaron el poder el pasado 15 de agosto, más de 11.000 personas han abandonado Afganistán a bordo de los aviones fletados por países occidentales, especialmente desde el aeropuerto de Kabul.