Urkullu inicia el curso en Miramar con objetivos conocidos y críticas a EH Bildu
Urkullu ha iniciado el curso político en el Palacio de Miramar, donde ha reiterado que el objetivo de Lakua es situar la incidencia acumulada por debajo de los 60 casos. No ha dejado pasar la oportunidad de cargar contra EH Bildu por los recibimientos y por los disturbios de las últimas semanas.
El lehendakari de la CAV, Iñigo Urkullu, ha comparecido ante los medios tras la reunión del Consejo de Gobierno en el Palacio de Miramar este martes, una cita que marca el inicio del curso político. Como era de esperar su intervención ha estado marcada por la pandemia, alabando las medidas adoptadas por su Gobierno y anunciando objetivos de cara a los últimos cuatro meses del año, entre los que figura situar la tasa de incidencia acumulada por debajo de los 60 casos por 100.000 habitantes.
Este objetivo no es nuevo. Lakua ya lo ha puesto sobre la mesa en otras ocasiones, y no lo ha cumplido. Tal vez por eso Urkullu ha establecido otros «objetivos intermedios» de cara a las próximas semanas, mucho menos exigentes. Así, ha señalado que trabajarán para situar la tasa por debajo de 300 casos (ahora está en 327), reducir el número de personas ingresadas en la UCI «a las cifras más bajas del escenario 1» y vacunar al 85% de la población mayor de 12 años.
En el ámbito económico, ha apuntado que la CAV «se acerca a la normalidad», y ha indicado que sus previsiones contemplan un crecimiento acumulado del 6,7% este año y del 5,7% el curso que viene. Es más, a su juicio en 2022 «se recuperará definitivamente todo el PIB perdido durante la pandemia». Y ha afirmado que «esta recuperación se está trasladando al mercado laboral», pese a que a día de hoy 12.000 personas continúan acogidas a ERTE.
Los datos económicos aportados por Urkullu tampoco son nuevos, van en línea con los números presentados el pasado mes de julio por el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu. Y tampoco ha habido novedad en las respuestas que ha dado a las preguntas relacionadas con competencias y autogobierno, dejando una vez más la pelota en el tejado del Parlamento de Gasteiz sobre el nuevo estatus o reforma estatutaria y limitándose a defender una «profundización del autogobierno en base a una actualización».
«Creo que nuestro autogobierno recogido merece ser actualizado, pero esta es una cuestión que corresponde a los grupos parlamentarios», ha aseverado antes de defender la coalición de gobierno con el PSE: «Estoy encantado». Sobre los grupos de la oposición, el lehendakari ha mostrado su «disposición al diálogo», siempre que este sea «discreto».
Cabe señalar que el mensaje de mano tendida ha estado seguido de una dura crítica, basada en la postura que han mantenido los diferentes grupos, incluido su socio de gobierno, sobre la política energética, cerrando la puerta a la exploración de gas en Subilla-Gasteiz, una decisión que ha vinculado con el aumento del precio de la luz. «Nos autolimitamos en la exploración de gas natural que podamos disponer, siendo una energía de transición», ha manifestado.
«Otegi justifica»
Urkullu ha cerrado su intervención cargando «particularmente» contra EH Bildu por su posición ante el recibimiento a los presos y presas vascas que regresan a Euskal Herria tras haber cumplido las condenas impuestas por los tribunales españoles.
Asimismo, ha acusado a Arnaldo Otegi de «justificar solapadamente» los disturbios nocturnos por considerar que la actitud de algunos jóvenes se enmarca en el «modelo de ocio impuesto por el neoliberalismo».